La Policía Local ha estado haciendo un seguimiento de la calle Arco de San Esteban, tras las quejas vecinales, para comprobar el trasiego de vehículos no autorizados a pesar de ser peatonal. El informe que se han elaborado recomienda la colocación de un bolardo que controle los accesos y solo permita el paso a los residentes.
La conclusión se basa en que se trata de una vía de especial protección al estar en la zona de amortiguamiento de la Catedral, declarada Patrimonio de la Humanidad y sometida a las normas de la Unesco, y en el entorno de la iglesia de San Esteban. A ello se añade que es una calle peatonal y debe tener el mismo tratamiento que el resto del centro histórico. En este sentido, el informe recuerda que la cercana calle Pozo Seco cuenta con un pivote que impide el tránsito de vehículos, de modo que no hay razón para que en Arco de San Esteban no se haya colocado.
La instalación de este elemento impedirá el paso de coches no autorizados con el objetivo de tener que evitar dar un rodeo para salir de la zona alta de la ciudad. Y es que los conductores siguen empleando esta calle a pesar de contar con una señal que indica que es peatonal y está prohibido el tráfico rodado. Sin embargo, el hecho de que no haya un elemento fijo que lo impide hace que se haga caso omiso de la señalización vertical.
Los residentes llevan mucho tiempo quejándose de esta situación, dado que supone un peligro cuando salen de sus portales confiados de que es una calle peatonal, además a determinada altura hay un estrechamiento, o al salir con sus vehículos del garaje. También se han llevado algún susto los turistas que acuden a ver la iglesia o el arco de San Esteban o el CAB, los usuarios del comedor de las Hija de la Caridad San Vicente Paúl o los escolares que acuden andando al colegio Saldaña.
Tras el informe de la Policía Local será la sección de Tráfico la que mueva ficha y proceda a su instalación en la confluencia con la calle Saldaña. Todas las partes ganarán en tranquilidad.