Javier de las Heras

Aguas Abajo

Javier de las Heras


De equipos médicos

14/12/2023

Pensaba hacer esta columna sobre las atrocidades que está cometiendo un estado supuestamente democrático (Israel) en respuesta a las cometidas por un grupo terrorista, pero la escucha de un reportaje en la radio me ha hecho cambiar de opinión.

La cosa es que la fundación de Amancio Ortega, la mayor fortuna del país, donó generosamente nueve millones de euros para que un hospital de Madrid comprara un carísimo aparato para aplicar radioterapia de precisión en numerosos tumores cancerosos, lo que mejora enormemente los tratamientos existentes en la actualidad y la vida, y la esperanza, de los pacientes. Pero hete aquí que el invento solo lo aplican en turno de mañana y los días de diario, nada de sábados y festivos. Ese mismo aparato en otros lugares tiene un rendimiento tres veces mayor que el de Madrid. El problema es que solo hay unos pocos técnicos preparados para su manejo por los recortes de plantilla y las vacantes existentes en la sanidad madrileña. Para agravar el caso, a algunos técnicos que estuvieron formándose en el extranjero en el manejo de esta tecnología, al llegar a la capital no les renovaron sus contratos de trabajo.

Eso sí, la presidenta madrileña ha gastado cerca de 200 millones en la construcción de un seudohospital (sin quirófanos) criticado duramente por la mayor parte de la profesión médica, que habla del famoso Zendal como de un almacén de enfermos. Para eso sí que había dinero. Ni que decir tiene que cuando un (i)responsable político habla de bajadas de impuestos, las consecuencias son los recortes en Sanidad, Educación públicas o en cualquier otra cosa que mejore la vida de la mayoría social. ¿Y a quién favorece todo esto? Pues ya lo pueden imaginar: a la sanidad privada. Pero eso es lo que votan los madrileños...

Y mientras tanto siguen sin comenzar las obras del nuevo, y necesario, hospital de Aranda.