La gerente del HUBU, Ana Lucía Fernández Eroles, ha retomado dos temas pendientes desde antes de la pandemia y de importancia para el hospital: la realización de la cirugía oncológica peritoneal mediante la técnica Hipec y la solicitud de la inclusión de la logopedia en la cartera de servicios del complejo asistencial de Burgos. En lo relativo al procedimiento quirúrgico -que permite extirpar tumores a la vez que se aplica quimioterapia a temperatura elevada, Fernández indicó que no solo ha vuelto a realizarse en Burgos sino que «queremos priorizarlo» y con respecto a la logopedia señaló que la Consejería de Sanidad tiene la petición sobre la mesa desde el año pasado -y no es la primera vez- «pero a día de hoy no hemos tenido respuesta». Aun así, insistió en que contar con profesionales de este tipo en el hospital «es una demanda clarísima».
El HUBU solicitó en 2016 y en 2018 que le autorizaran la incorporación de logopedas a su plantilla, al considerar que había demanda suficiente de tratamientos como para justificar la contratación directa de un servicio que otros hospitales de su categoría ofertan y que, sin embargo, en Burgos se adjudica periódicamente a la sanidad privada. La última externalización se aprobó a finales de 2021 por un importe de 835.000 euros, con varios adjudicatarios para atender a población de toda la provincia y durante un máximo de dos años. De no haber cambios, Sacyl tendrá que volver a sacarlo a oferta pública a finales del 2023.
Ahora, Fernández explica a este periódico que «se hizo un estudio serio» y que se ha efectuado de nuevo la petición formal en Valladolid. Pero admitió que tampoco se llama a engaño y matizó que «hay que ver la sostenibilidad del sistema y de los recursos que dispone la Consejería». No se sabe, por tanto, cuándo habrá respuesta a esta solicitud que, por otra parte, dista de ser nueva.
Tampoco puede considerarse como tal la realización de la cirugía oncológica peritoneal, cuya implantación en Burgos frenó José María Romo al poco de ponerse al frente de la gerencia del complejo asistencial de Burgos, a finales de 2019. Entonces, se decidió que, por norma, todos los pacientes serían derivados «por lealtad organizativa» al hospital de referencia en la materia, que era el vallisoletano Río Hortega. Sin embargo, dado que el HUBU había invertido tiempo y recursos en formar a cirujanos generales en el manejo de la técnica Hipec (quimioterapia intraperitoneal hipertérmica), que la técnica se aplicaba desde 2018, que había demanda y que Cirugía General defendía la importancia de poder ejecutarla para evitar desplazamientos innecesarios a pacientes delicados, Romo accedió a que se evaluara «cada caso» para ver si alguno podía tratarse en Burgos.
La pandemia, no obstante, paralizó en seco este tipo de innovaciones y, ahora, Fernández Eroles ha reconducido de nuevo la situación. «Todo lo que los profesionales nos piden en cuanto a nuevas técnicas o nuevas formas de abordaje intentamos potenciarlo», dijo, antes de aludir directamente a la Hipec. «La tuvimos hace años, ahora hemos vuelto a hacerla y queremos priorizarla», concluyó.