No hay político que se precie que no tenga su asesor o asesores. El nombramiento de Vicente Marañón como vicealcalde, tras el pacto de gobierno con el PSOE, no ha sido una excepción.

Los grupos de la oposición conocieron ayer en la Comisión de Hacienda la incorporación de una enmienda a la modificación del presupuesto, que se aprobará este viernes, para la creación de un puesto de personal eventual como adjunto al Gabinete de Alcaldía. La persona que lo ocupe cobrará  65.000 euros al año. Se trata de un salario correspondiente al Grupo A2 de la administración pública y además percibirá un complemento de destino.

Estará por debajo en el escalafón del exconcejal del PSOE y ahora director del Gabinete de Alcaldía, Antonio Fernández Santos, que  el alcalde, Daniel  de la Rosa rescató para este puesto por su gran conocimiento de la administración local y después de que no se le incluyera en su lista.

Las críticas del Partido Popular no se hicieron esperar. «Para esto quiere las modificaciones del presupuesto el PSOE, en lugar de estar pensando en las necesidades de los burgaleses», aseguró su portavoz, Carolina Blasco.