En el último mes, a mi alrededor, se han multiplicado no los contagios, como era lo previsible, si no los nacimientos de nuevos peques a este mundo de locos. Este hecho me tiene impresionada, será porque nunca me he planteado la maternidad como opción en mi vida. Esta decisión a lo largo de los años me ha situado muchas veces fuera de los esquemas marcados para las mujeres en nuestra sociedad. Es divertido, porque me he pasado mucho tiempo dando explicaciones al respecto e incluso ahora, que ya estoy más cerca del retiro que de otra cosa, me siguen preguntando con verdadero interés sobre esta decisión, que siendo para mí tan natural como el respirar, genera sin embargo sorpresa y hasta creo que desasosiego en los demás.

La realidad es que nunca me ha interesado ser madre; más bien todo lo contrario. El devenir personal, familiar, social, laboral y, ahora, hasta sanitario me han confirmado que no era una prioridad para mí. Sin embargo, ello no es obstáculo para que sienta un enorme respeto y admiración por todos aquellos que han dado ese paso, no sé si desde la valentía o la ignorancia más absoluta sobre aquello que se les venía encima, pero, en cualquier caso, apostando por un proyecto distinto al mío, que, por otro lado, no se me escapa que es la única vía para que todo este tinglado que tenemos montado siga funcionando.

Es muy llamativo que esta decisión, cuando la toma una mujer, parezca algo incomprensible y que todavía genere cierta sospecha en nuestra llamada 'sociedad moderna', tan feminista e igualitaria. Espero que las generaciones de niñas que acaban de llegar averigüen rápido que lo de ser princesa no es algo obligatorio y que puede resultar un rollo morrocotudo; que está bien para algún rato, pero que da muy poco de sí en la vida real. Y que, sin duda, hay otras posibilidades y opciones que te pueden hacer muy feliz.

Así que a India, Camila y Martina, recién llegadas a este mundo, os deseo un feliz viaje, lleno de ilusión, emociones y en el que podáis elegir y decidir libremente, eso sí, siempre desde el respeto y la responsabilidad. Exactamente como hasta hace bien poco y mientras nos han dejado lo hemos venido haciendo los que ahora ya somos adultos.