Guillermo Arce

Plaza Mayor

Guillermo Arce


Adictos a las pantallas

07/11/2023

Nos acostamos y nos levantamos abobados mirando y acariciando con el dedo una pantalla. Algunos hasta en la duermevela encienden el terminal y se dedican a observar una secuencia infinita de imágenes adictivas que se van enganchando una tras otra hasta que se dan cuenta que queda poco para que suene el despertador (del móvil). Muchas conversaciones se interrumpen indefinidamente con los interlocutores perdidos en las redes sociales y cada vez son más los que simplemente no conversan porque junto a la hipnosis permanente de imágenes emplean unos auriculares intraurales que les transforman en auténticos zombies sordos. ¿Cuántas alertas de whatsapp han interrumpido una charla? Antes se entendía como una falta de educación (que lo sigue siendo);ahora se admite como algo normal... Damos más prioridad a la pantalla que a la vida real. 

El otro día un amigo reconoció que 'había dejado de leer libros', que poco a poco los youtube, los facebook, los X y los instagram y los tik tok habían absorbido todo su tiempo y toda su atención. Lo reconocía y, a la vez, se dejaba llevar, como un buen chute de heroína. Cada vez le quedaban menos fuerzas para pasar de página y cada vez le era más cómodo ver pasar imágenes, cada una más interesante que la anterior y así hasta el agotamiento mental o hasta mañana o hasta una nueva madrugada mal dormida, donde comenzará el nuevo el ciclo digital. Sentí que estaba hablando de mí...

Supongo que hay muchos doctores estudiando este fenómeno tan brutal de hipnotismo digital. El LSD no hizo tantos estragos en nuestras mentes. Me pregunto cuántas enfermedades está incubando tal sobreexposición virtual, y qué cambios sociales y culturales nos aboca la era de las pantallas. Nunca ha sido tan fácil modular (y torturar) una mente. ¿Me escuchan...?