Una plaga de ratas invade las instalaciones de la Protectora de Animales de Briviesca desde hace unos meses. Según fuentes de la entidad, los animales se han comido e inutilizado más de 200 kilos de pienso, material de trabajo y de limpieza.
El problema se trasladó al Ayuntamiento pero al comprobar que nada se hacía para remediarlo, la Protectora optó por comprar trampas y veneno, dado el riesgo que podían correr los animales que allí habitan. Sin embargo, el número de roedores resulta tan elevado que es necesario que se tomen otras medidas urgentes. Uno de los baños de las instalaciones no puede utilizarse últimamente debido al los fuertes olores procedentes de los excrementos de las ratas.
El alcalde de la ciudad, Álvaro Morales, reconoce que actualmente el Ayuntamiento «no cuenta» con los servicios de una empresa especializada en desratización y que el personal municipal es quien se encarga de efectuar esas labores. En los presupuestos de este año el anterior equipo de gobierno incluyó una partida de 3.000 euros destinada a la exterminación de estos animales y, pese a que hay vecinos que han manifestado sus quejas ante tal situación, la partida sigue sin ejecutarse.
Una plaga de ratas invade la Protectora de AnimalesMorales expone que la corporación «estudia la posibilidad» de ampliar el contrato con la empresa Descale, encargada del servicio de control de aves en la capital burebana, para que se ocupe también del problema de las ratas. El regidor declara que intentarán «solucionar» este tema lo «antes posible» y recuerda que «ratas hay en todos los sitios». Asimismo, de cara a los próximos presupuestos se tratará de «aumentar la partida o de hacerla más efectiva».
Ciudadanos ha manifestado en múltiples plenos la preocupación existente por parte de algunos vecinos ante la proliferación de roedores en la ciudad. En la última sesión celebrada en septiembre, en el apartado de ruegos y preguntas, la representante de Cs, María Guimarey, comentó que se habían realizado fotografías a ratas y topillos en la ciudad y preguntó al alcalde en que el servicio de la desratización se llevaba a cabo. Morales contestó que el trabajo «era continuo, con medios propios del Ayuntamiento y Aquona pero que posiblemente habría que incrementar la constancia en ello». La portavoz de la formación naranja considera que estas actuaciones se deben llevar a «rajatabla» por prevención.