Rosalía Santaolalla

Sin entrar en detalles

Rosalía Santaolalla


Bocata de salchichón

26/12/2022

Una acostumbra a ir escopetada a todas partes pero, como me enseñaron mis padres, la profe del jardín de infancia y un curso de seguridad vial de esos que hacíamos en la azotea de la Policía Local, intento aflojar el paso cuando tengo que cruzar una calle y paro, hasta que me aseguro de que los coches se detienen. Sobre todo porque a veces no paran, sino que aceleran, y los conductores hacen el típico gesto de excusa con la mano que lo mismo puede significar un «perdón» que un «te esperas, que tengo prisa». Pero les prometo que hasta esta semana no me había encontrado a ninguno blandiendo un bocadillo de salchichón como argumento para no parar en un paso de peatones. Hace unos días me ocurrió, y detrás del bocata me encontré con la cara de la conductora, masticando con fruición. Eran las dos y pico de la tarde, yo también tenía hambre y la verdad es que el salchichón tenía buena pinta, pero lo vi flojo como excusa para no cumplir con el código de circulación. Puede ser que la pandemia nos haya dejado a todos en un sálvese quien pueda o que las Navidades nos pongan de los nervios -o las dos cosas a la vez-, el caso es que dan ganas de buscar un refugio hasta que el personal deje de estar tan crispado. 

O ponerse en bucle ese momento en el que a Alonso y Ángel, los dos niños que han cantado este año el Gordo de Navidad, se les oye decirse «te quiero» y «te amo» entre los gritos y los aplausos del respetable. Las luces, los villancicos, las cenas de empresa, las reuniones familiares, todo muy bien, pero no es Navidad hasta el momento en que se escuchan las voces de la chavalada de San Ildefonso, con esos nervios que proceden de donde nace la ilusión. Es algo más allá de la lotería, que muchos seguimos comprando como rito social, porque sabemos la escasísima probabilidad de que nos toque nada. Este año, por cierto, ni un céntimo. Desde ese día en adelante, que cada uno celebre o no, como y con quien quiera. 

Conduzcan con cuidado.