Cuando los proyectos no se retrasan en una Administración lo hacen en otra. El Ministerio de Cultura no se ha mostrado en los últimos años demasiado ágil ni diligente en la tramitación administrativa de la rehabilitación del Hospital de la Concepción. Pero una vez que el proyecto de ejecución se halla en manos del Ayuntamiento, es la maquinaria burocrática del Consistorio burgalés la que exhibe toda su parsimonia a la hora de dar el visto a los planes del Gobierno y conceder la licencia de obra.

Fue a principios del mes de junio de este año cuando el departamento que dirige Miguel Iceta envió al Ayuntamiento capitalino la solicitud de dicho permiso, fecha en la que remitió también el proyecto de ejecución. Es el departamento de Licencias el que tiene que estudiar toda la documentación y recabar informes de las distintas áreas municipales para dar el visto bueno al proyecto. Paralelamente se concedería la licencia para iniciar las obras.

Pues bien, en estos más de cinco meses la sección aún «está informando», si bien «se espera tener pronto el beneplácito», señaló el concejal de dicho negociado, Ignacio Peña, quien no pudo establecer una fecha aproximada de cuándo se otorgará dicha autorización ni cuántos informes favorables quedan por remitir.

(Más información, en la edición impresa de este sábado de Diario de Burgos o aquí)