Carlos Alonso de Linaje

Crecimiento económico

Carlos Alonso de Linaje


Presión fiscal

03/05/2023

Es esta una semana marcada por el uno de mayo, día internacional de los trabajadores y las trabajadoras, donde se reivindican los derechos de estos. En la actualidad, en una u otra medida, todos somos trabajadores/as, aunque de forma implícita se intente deslindar la importancia de unos y otros en función de su renta. En un momento en el que todos los colectivos están inmersos en una exigencia de mejoras salariales, de reducción de horario, de mejora de las pensiones y un sinfín de pretendidos derechos, debemos pensar quién y con qué fondos se va a pagar semejante dispendio. La realidad es muy tozuda y por más que nos empeñemos los impuestos los pagan las clases medias. Ya se han publicado los datos del ejercicio 2022 y cabe destacar que, en un año récord de recaudación tributaria, alcanzando esta los 255.463 millones de euros, la deuda pública creció en 75.305 millones de euros, tan sólo seis millones de euros menos que el año precedente. 

Uno de los factores para tener en cuenta fue el incremento del gasto público que supuso 23.433 millones de euros alcanzando un gasto total de 634.297 millones de euros. Cuando hablamos de estas cantidades de dinero es fácil perder la referencia en la proporción, de hecho, a las administraciones les gusta hablar en porcentaje sobre los valores, para defender su reducción porcentual. Si tomamos como referencia la recaudación tributaria y la riqueza del país medida por el Producto Interior Bruto vemos como en el año 2022 la presión fiscal fue del 19,22%. Ese mismo dato, en el ejercicio 2021 fue del 18,51% y en el 2017 del 16,68%. Esto supone un incremento de un 2,54% sobre el PIB. En valor absoluto supone un incremento de recaudación de 2017 a 2022 de 61.512 millones de euros más. En teoría no se han subido los impuestos a las clases medias solo a los Bancos, a los ricos y a todos a aquellos que se lo merecen. Lo cierto es que nos suben a todos aquellos que pagamos impuestos y aun así es imposible cubrir los gastos ordinarios con los impuestos recaudados, la demagogia está servida.