El buen tiempo de las últimas semanas sacó a la calle a muchos chavales que aprovecharon sus periodos vacacionales para alargar las noches y beber en la calle en el entorno de Las Llanas. Sin embargo, el último fin de semana se vivieron situaciones que ya parecían olvidadas en el Centro Histórico: suciedad, gritos, orines e, incluso, pintadas. Actos que se había erradicado prácticamente gracias a la labor policial. Los vecinos alertaron de estas conductas al Ayuntamiento y la concejala de Seguridad Ciudadana, Blanca Carpintero, recogió el testigo ayer en una reunión, a la que asistió también el intendente de la Policía Local, de cara a evitar que lo vivido el viernes y el sábado vuelva a repetirse, no solo durante el verano, sino en un futuro.
La medida más inmediata será, según les anunció Carpintero, reforzar la presencia policial con dos o tres efectivos más en el entorno de Las Llanas con un fin disuasorio y preventivo en las horas más conflictivas. Es decir, los agentes no multarán si uno o varios jóvenes están practicando botellón civilizadamente en la calle, pero sí habrá sanción si se producen actitudes como las del pasado fin de semana. Además, hay un compromiso firme del Ayuntamiento de Burgos de proceder inmediatamente a la limpieza de aquellas zonas donde se hayan producido grafitis y también al arreglo del mobiliario urbano.
La concejala de Seguridad Ciudadana también mostró su firme compromiso de actuar para erradicar el recurrente problema del incumplimiento del horario de cierre de los bares. El hecho de que algunos locales permanezcan abiertos a deshora ha provocado que, en ocasiones, se produzcan tumultos o altercados. Por ello, van a volver a intentar conseguir la colaboración de la Policía Nacional para instar a los responsables de estos establecimientos a que cumplan las ordenanzas.
Todas estas medidas no son sino complementarias al plan de ocio alternativo para jóvenes que quiere impulsar el gobierno municipal, un documento que diseñarán desde el área de Juventud durante los próximos meses. «Cuando hablamos de un problema de este tipo los vecinos también son conscientes de que la Policía Local puede actuar, pero esto es solo una parte y hay que abordar este asunto de una manera más global», expone la concejala de Seguridad Ciudadana.
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