Denuncian que más de 30 médicos sin MIR trabajan en Primaria

ANGÉLICA GONZÁLEZ
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El Colegio Oficial tiene previsto analizar la posibilidad de llevar a los tribunales esta situación, que califica de «ilegal», en cuanto concluya el proceso de renovación de su junta directiva, que acaba de iniciarse

Detalle de una consulta de un centro de salud. - Foto: Valdivielso

La crisis en la que está inmersa la Atención Primaria en Burgos, al igual que en el resto de España, no acaba de despejarse. La enorme falta de profesionales de Medicina de Familia -advertida desde hace años  por todas las voces de la Medicina- ha provocado que la Gerencia de Atención Primaria de Burgos esté permitiendo que más de una treintena de médicos sin MIR trabaje en las consultas de los centros de salud, fundamentalmente del área rural. El MIR, como se sabe, es el nombre que recibe el examen que los estudiantes que terminan 6º de Medicina han de pasar para realizar una especialidad, y sin este proceso (examen y especialización) tienen prohibido desempeñarse en el Sistema Nacional de Salud. Quienes están ahora ocupando las vacantes por jubilación y otras causas que se han producido en las consultas son, en su mayor parte, profesionales que han venido de otros países, fundamentalmente de América Latina (Cuba, Venezuela, Colombia...), pero también hay jóvenes españoles que terminaron la carrera y o no hicieron el MIR o no lo aprobaron, algunos sin mucha experiencia, y la Gerencia, aún así, les ha ofrecido un empleo, ya que la necesidad es muy grande.

¿Qué ha ocurrido para que esto, que es «ilegal», como lo califica el Colegio de Médicos, esté ocurriendo a pesar de que desde hace meses viene siendo denunciado por las entidades colegiales, los sindicatos y las sociedades científicas? El origen está en la pandemia. El 29 de septiembre de 2020 el Boletín Oficial del Estado publicó el Real Decreto Ley de medidas urgentes en materia de teletrabajo en las Administraciones Públicas y de recursos humanos en el Sistema Nacional de Salud para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19. Esta norma incluía medidas de contratación excepcional de personal facultativo que permitió contratar a médicos formados en España que hubieran superado la puntuación mínima en el MIR pero que no hubiera  obtenido plaza, a los que hubieran acabado la carrera y a los formados en otros países,  muchos de los cuales no tienen un equivalente a esta formación.

Pero esta norma dejó de tener vigor justo un año después ya que el 29 de septiembre de 2021 no fue prorrogada. «Lo hemos denunciado públicamente desde los colegios y las sociedades científicas en múltiples ocasiones. Desde 1995 en España es obligatorio tener una especialidad para ejercer en el Sistema Nacional de Salud, no en los centros privados. Y esto solo ha tenido la excepción de la pandemia porque no había profesionales por ningún sitio, así que se permitió que pudieran hacer actividad asistencial pero con supervisión, algo que un año después decayó pues la norma no ha tenido prórroga», explica el vocal de Tutores del Colegio de Médicos de Burgos, Ángel Matía, quien asegura que Sacyl ha aprovechado esta coyuntura para hacer frente a  la falta de profesionales.

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