Medalla para los guardias civiles del tiroteo pero no este año

F.L.D. / Burgos
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La Comandancia aclara que se han iniciado los trámites para reconocer a los agentes que participaron en la intervención en Villagonzalo, pero no llegarán a tiempo para el 12 de octubre

Fuentes de la Comandancia de Burgos aclaran que, si bien este año no llegará el distintivo rojo, sí lo hará próximamente. - Foto: Alberto Rodrigo

Todos los agentes de la Guardia Civil que participaron en el tiroteo ocurrido el pasado 19 de abril en Villagonzalo Pedernales tendrán su reconocimiento en forma de medalla con cruz de distintivo rojo, pero no será este año, como sí ocurre hoy con tres policías nacionales que también participaron. Según confirman fuentes de la Comandancia de Burgos, el expediente se inició hace meses y sigue su trámite habitual, pero no llegará a tiempo para el día de la patrona del próximo 12 de octubre.

Asociaciones de guardias civiles manifestaron su decepción y enfado al enterarse de que los policías nacionales iban a recibir la distinción, que lleva aparejada una dotación económica, el día de los Ángeles Custodios, mientras que sus compañeros, que se habían jugado la vida en una intervención en la que se tuvo que abatir a un agente de la Comisaría Sur de A Coruña de baja forzosa, no tenían el mismo reconocimiento.

Sin embargo, fuentes de la Comandancia de Burgos aclaran que, si bien este año no llegará el distintivo rojo, sí lo hará próximamente. "Los trámites se iniciaron hace meses y llevan su tiempo. Nosotros hemos encabezado la investigación y por eso se ha ralentizado todo un poco más que en la Nacional. A la Patrona de este año no llegará, pero seguro que el año que viene tendrán la medalla", recalcan.

Más allá de la cruz roja, indican, la jefatura de la Comandancia ha reconocido "desde el primer momento" el trabajo "impecable" de los agentes que intervinieron el pasado 19 de abril en Villagonzalo Pedernales. "El teniente coronel les recibió y les dio la enhorabuena porque habían hecho una actuación fantástica", insisten las mismas fuentes.

Los agentes intervinientes tuvieron que abatir al policía nacional de baja forzosa después de que éste se liara a tiros, primero en el túnel de Las Quintanillas y posteriormente en la gasolinera de Villagonzalo, donde se atrincheró al verse acorralado. Esa misma mañana, había robado el arma con el que atacó a los guardias burgaleses a un compañero de la Comisaría Sur de A Coruña.