Lo que pudo ser y no fue

C.P. / Burgos
-

El Hereda San Pablo se ha quedado a las puertas del ascenso a la ACB en una temporada llena de altibajos. Gonzalo Corbalán ha sido la mejor noticia

Gonzalo Corbalán, escolta del Hereda San Pablo. - Foto: Patricia

El Hereda San Pablo configuró el verano pasado una de las plantillas más potentes de la LEBOro para pelear por el ascenso a la ACB, pero se ha dado de bruces con la realidad de una categoría realmente incómoda y competitiva. Los burgaleses fueron incapaces de pelear por la primera plaza y se vieron abocados a jugársela en el play off y la Final Four. Estuvieron a punto de conquistar el objetivo, pero en el partido decisivo se vieron arrollados por el Zunder Palencia.

La temporada del San Pablo ha sido una montaña rusa desde el minuto uno. Ha tenido más tristezas que alegrías. El inicio irregular le costó el puesto a Paco Olmos, que siguió en el banquillo pese a no haber cumplido el año anterior el objetivo de la permanencia. A finales de 2022, llegó Curro Segura y a los pocos meses se produjeron tres cambios en la plantilla con los fichajes de Khyri Thomas, Ioannis Kouzeloglou y Carlos Suárez, que ocuparon las plazas de Calvin Hermanson y Andrija Marjanovic. Se notó una mejoría que acabó siendo insuficiente.

No hay un solo factor para explicar la frustración de seguir un año más en LEBOro, sino un cúmulo de ellos. La continuidad de Olmos resultó por no funcionar y jugadores que llegaron con el cartel de estrella dentro de la categoría han acabado siendo una desilusión. Los máximos exponentes son Calvin Hermanson, mejor tirador del año pasado, y Obi Enechionyia, que contaba con experiencia en ACB y había ascendido con el Real Betis. Ambos han pasado sin pena ni gloria, al igual que otros tantos jugadores que han rendido por debajo del nivel que se les presupone.

Curro Segura llegó a finales de 2022 para sustituir a Paco Olmos.Curro Segura llegó a finales de 2022 para sustituir a Paco Olmos. - Foto: Patricia

La mejor noticia de toda la temporada, sin lugar a duda, ha sido la irrupción de Gonzalo Corbalán, una apuesta que no era sencilla al ocupar plaza de extracomunitario, pero que ha resultado un éxito, pues se trata de un jugador con un enorme potencial. También han dejado buenas sensaciones Álex Barrera, Álex López y Carlos Suárez, que aportó su granito de arena los meses que estuvo.

Los demás han pasado por el San Pablo sin dejar huella. Rasid Mahalbasic no ha dado todo lo que se pedía por la enjundia de su fichaje, Khyri Thomas no rindió en los momentos decisivos y Luka Rupnik tampoco estuvo al nivel a la hora de la verdad. Solo por nombrar algunos de los jugadores que estaban llamados a dar un paso adelante por su peso en la plantilla.

LUKA RUPNIK | BASE

Llegó en noviembre y tuvo un debut espectacular ante el Gipuzkoa, pero su rendimiento a lo largo de la temporada ha sido irregular teniendo en cuenta su caché. Además, su pobre actuación en la Final Four, en la que apenas apareció,le aleja de la versión que se esperaba de él. Aun así, fue el más valorado del equipo con 11 puntos y 13 de valoración.

RODRIGO SAN MIGUEL | BASE

Ha sido el jugador que más críticas ha encajado por sus bajos porcentajes de acierto, pero esa nunca ha sido su especialidad a lo largo de su carrera. Se liberó con la llegada de Rupnik y se ha sentido más cómodo en un rol 'secundario'. Fue de menos a más, ayudó mucho en defensa, pero tal vez se esperaba que tuviera más peso en el equipo.

ÁLEX LÓPEZ | ESCOLTA

Regresó en busca de un nuevo ascenso y fue de lo mejor en el inicio de la campaña. Actuó de base en varios partidos hasta la llegada de Rupnik y, cuando irrumpió Corbalán, aceptó de buen grado tener menos protagonismo. Es un jugador de carácter. En el play off y la Final Four ha estado muy bien. De hecho, es de los pocos que se salvan de la final.

ÁLEX BARRERA | ALERO

Le costó empezar porque venía de unos años sin un papel protagonista en sus equipos, pero fue creciendo con el paso de los partidos y fue de los más fiables a la hora de la verdad. En el tiro exterior, su especialidad, se mostró muy certero en el play off y también en la Final Four, aunque sus compañeros no le encontraron mucho. Es de los pocos que se salvan de la Final Four.

GONZALO CORBALÁN | ESCOLTA

El argentino es la mejor noticia para el Hereda San Pablo esta temporada. Pese a ocupar plaza de extracomunitario, el club confió en su talento y ha acabado siendo uno de los hombres destacados de la plantilla. Y eso que hubo un tiempo en el que no gozaba de mucha confianza con Paco Olmos y estuvo a punto de ser 'cortado', pero convenció a Curro Segura con un gran desparpajo para su edad y finalmente continuó en el plantel. Su potencial es enorme.

CALVIN HERMANSON | ALERO

Ha sido la gran decepción de la temporada. Llegó en verano después de haber sido el mejor tirador de la LEB Oro en Castellón, pero su forma física estaba lejos de ser la ideal. No estuvo acertado en el triple y, sin ese arma, su juego se queda en nada. Además, tuvo problemas físicos y acabó siendo 'cortado' en febrero para abrir la plaza de extracomunitario a Khyri Thomas.

KHYRI THOMAS | ESCOLTA

Aterrizó en Burgos después de mucho tiempo sin jugar por problemas personales. Se trabajó en un plan con él para ponerle en forma y bajó 11 kilos en solo unos meses. Su profesionalidad fue total, pero se le trajo para marcar la diferencia en los duelos decisivos y, aunque sí brilló en algún partido del play off, no tuvo su día en ninguno de los choques de la Final Four.

 

ANDRIJA MARJANOVIC | ALERO

El papel del serbio en el Hereda San Pablo fue del todo irrelevante porque apenas tuvo minutos. Se perdió parte de la pretemporada por un problema con el visado, pero cuando estuvo en la dinámica del equipo tampoco gozó de minutos y acabó siendo cortado. Su presencia solo se entendía porque era cupo (español).

MINDAUGAS KACINAS | ALERO

Llegó a Burgos al final de la pretemporada y le costó entrar en el equipo, pero su polivalencia fue muy útil tanto para Olmos como para Segura. Era capaz de alternar las posiciones de alero y ala-pívot y de aportar mucho en el trabajo sucio, ese que no aparece en las estadísticas. Su debe está en que en la Final Four apenas apareció, como casi nadie.

CARLOS SUÁREZ | ALA-PÍVOT

Estuvo a prueba unos días en febrero para ver su estado físico después de mucho tiempo sin jugar. Su rendimiento durante estos meses en Burgos superó las expectativas. Ocupó la plaza de cupo de Marjanovic e hizo más en un día que el serbio en toda la temporada. De hecho, no tardó en convencer a Segura y se hizo un hueco en la rotación.

OBI ENECHIONYIA | ALA-PÍVOT

Con el cartel de haber jugado en ACB y haber ascendido con el Betis, se esperaba mucho más de Enechionyia. Se suponía que venía para abrir el campo con su acierto exterior y sus porcentajes fueron muy malos. Además, los problemas físicos le lastraron en el segundo tramo del curso. Una decepción.

MARC EDDY NORELIA | ALA-PÍVOT

Se esperaba más de él, ya que ha promediado la mitad de puntos y valoración que durante su etapa en Oviedo. También ha jugado menos. Pura energía, pero muchas veces sin control. Ha tenido partidos buenos y otros en los que apenas aparecía. Sobre todo, se sentía cómodo a la contra y al principio el juego del equipo no le benefició.

IOANIS KOUZELOGLOU | ALA-PÍVOT

Llegó en febrero por petición expresa de Segura y aportó en su posición durante los primeros partidos, pero unas molestias en la rodilla le sacaron del equipo y ya no volvió a entrar. Se quedó fuera por decisión técnica el resto de la campaña, algo incomprensible teniendo en cuenta que era un hombre de confianza del entrenador.

RASID MAHALBASIC | PÍVOT

Estaba llamado a ser el jugador más diferencial de la LEB Oro, pero su perfil no es el de un líder nato que gana él solo los partidos. Su rendimiento fue un poco irregular, no tan alto como las expectativas que generó su fichaje, aunque su talento está fuera de toda duda. En el play off y sobre todo en la semifinal se vio al Mahalbasic que todo el mundo esperaba.

JOEY VAN ZEGEREN | PÍVOT

Llegó a Burgos sabiendo que iba a ser suplente de Mahalbasic en la posición de pívot y se puede decir que ha cumplido. Al final, su rol se limita a intimidar en defensa y jugar cerca del aro; eso se sabía cuando vino. Cuando sus compañeros han sido capaces de encontrarle, ha cuajado buenos partidos. Eso sí, sus números han empeorado respecto a otros años.

Una mejoría sin premio final

Curro Segura llegó a finales de 2022 con la misión de reconducir el rumbo del Hereda San Pablo tras la destitución de Paco Olmos. Cuando el preparador granadino se sumó el proyecto, el conjunto azulón era sexto y estaba a cuatro victorias de distancia del MoraBanc Andorra y el Zunder Palencia.

Con la primera plaza prácticamente imposible, se diseñó un plan para asaltar el ascenso a través del play off y la Final Four. No tardó en verse una mejoría en el juego del equipo y, aunque hubo altibajos a lo largo de la liga regular, consiguió llegar al tramo decisivo con todos sus jugadores a tope, incluidos los tres fichajes, y con un estilo reconocible.

A pesar de tener el 'factor cancha' en contra, arrolló (3-0) al Movistar Estudiantes y se metió en la Final Four, pero una vez ahí su equipo estuvo lejos de su mejor nivel. Se le vio espeso en ataque, sufrió para ganar al Gipuzkoa y acabó sucumbiendo con claridad frente al Zunder Palencia. Una derrota que dejaba sin premio el buen trabajo de Segura y que le costaba el puesto, ya que el San Pablo apostó por no renovarle.