Miguel Calvo

El retrovisor

Miguel Calvo


Memoria de pez

21/09/2023

Aunque sin aval científico, la sabiduría popular y películas como Buscando a Nemo limitan la memoria de los peces a solo unos segundos. Caso distinto es el de los elefantes, que pueden guardar recuerdos de hace 12 años, y el de los delfines que llegan a los 20 años. En cuanto al homo sapiens, la complejidad de nuestro cerebro, con sus miles de millones de neuronas, hace que cada persona tenga más o menos desarrolladas las capacidades para recordar a corto o a largo plazo, o para almacenar imágenes y sensaciones de nuestro pasado. Sin entrar en divagaciones científicas, me quiero referir de forma expresa a los problemas de memoria que aquejan a buena parte de la clase política, propensa a olvidar según sean las circunstancias, sus propias afirmaciones, posturas o compromisos que defendieron solo unos días o semanas antes.

El olvido va ligado a la memoria y se hace necesario para evitar la acumulación de datos inútiles, dolorosos o molestos. Pero en ocasiones, sin enfermedades de por medio, se convierte en algo demasiado evidente. Es el caso de los que quieren olvidar que no hace mucho se mostraban rotundos al aseverar que amnistías o figuras jurídicas similares no tenían encaje en la Constitución y ahora preparan nuevos argumentos para defender lo contrario con el objetivo de ganar apoyos que les ayuden a mantenerse en el gobierno. O el de los que tampoco quieren acordarse de que cuando ellos gobernaban aprobaron indultos masivos y se plegaron a las condiciones que entonces les impusieron partidos nacionalistas; y el de los que rechazaron en varias ocasiones la utilización de los idiomas cooficiales en el Congreso. En pocas semanas hemos visto cómo podemos olvidarnos de sumar, o de las promesas en campaña electoral de rebajas de la presión fiscal. De vez en cuando los políticos se acuerdan y luego se olvidan de la bateadora que desde hace 12 años lleva atrapada en un túnel de Somosierra, en la línea Madrid-Burgos, y de los muchos trozos de autovías pendientes de construir en esta provincia. Son solo ejemplos. 

Cambios de opinión, lapsus, y despistes pueden ser síntomas más o menos justificados siempre que no se conviertan en trastornos crónicos. Tratamientos contra la memoria de pez de algunos políticos mediante dosis de hemerotecas, videotecas o fonotecas parecen no tener demasiada eficacia. Quizá sea necesario cambiar de terapia. ¡Ah! Y no nos olvidemos, pero de verdad, de que mañana es el Día Sin Coche.