El consejo de administración del Servicio Municipalizado de Movilidad y Transportes (Smyt) aprobó ayer, con el voto a favor del PSOE, Cs y Podemos y la única oposición del PP, la propuesta de adjudicación al estudio de ingeniería y arquitectura MBG de la redacción del estudio de detalle y de los proyectos básicos y de ejecución de las futuras cocheras de autobuses que el Ayuntamiento quiere levantar en la última ampliación del polígono de Villalonquéjar. Aunque la superación de este trámite pudiera hacer pensar que la adjudicación formal será inminente, lo cierto es que un recurso presentado en el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales de Castilla y León (Tarcyl) por el edil del PP Jorge Berzosa retrasará la adjudicación y puede incluso que la ponga en peligro.
El concejal de Movilidad, Leví Moreno, no oculta su malestar por un recurso que interpreta como un nuevo intento del PP por «obstaculizar» la labor del equipo de Gobierno ya que ninguna empresa ni estudio ha presentado recurso alguno contra un pliego que, tal y como recuerda, cuenta con el aval de los servicios jurídicos, del área de Intervención...
El problema al que se enfrentan en el Ejecutivo local es que tienen que esperar a que el Tarcyl se pronuncie para poder adjudicar formalmente el contrato y los plazos se antojan importantes. Porquesi esa respuesta no llega antes de que finalice el año, lamenta el edil, la partida presupuestaria reservada para este fin se 'perdería' y no se podría ejecutar.
Llegados al punto de que el Tarcyl no se pronunciara antes del 31 de diciembre, el bipartito deberá decidir si, ante semejante tesitura, adjudica el contrato aún a riesgo de verse obligado a tener que rectificar después. Y aunque están convencidos de que el pliego era correcto, también lo es que hay un recurso en marcha.
Lo que sí es seguro es que el equipo de Gobierno sabe ya que en el mejor de los casos se va a retrasar la adjudicación de un contrato que se ha valorado en casi 210.000 euros y que servirá para diseñar la construcción de una instalación que el Ejecutivo estimó en su día (de manera aproximada) que exigiría una inversión de unos 8 o 9 millones de euros. De la que buena parte se financiaría con la venta de las actuales cocheras de la Carretera Poza (de las que la ciudad es propietario del 62% de los terrenos donde se asientan).
El recurso presentado por Berzosa y que persigue anular el proceso de licitación se concreta en que el pliego no establecía una división en lotes del concurso, en que no se fijaba un plazo de duración del contrato y en que no hay garantizada la existencia de crédito para los ejercicios futuros.
No es la primera vez que el PP le complica las cosas al final de año al equipo de Gobierno y prueba de ello son las alegaciones que presentó el ejercicio pasado contra la modificación presupuestaria. Lo hizo en el límite del plazo, provocó el retraso en su entrada en vigor y apenas dejó unos días hábiles (la Navidad estaba por medio) para poder comprometer un gasto de alrededor de 11 millones de euros. Ahí se encontraban partidas como las reservadas para la construcción de la subestación eléctrica de Villalonquéjar o la aportación al VIII Centenario de la Catedral.
La adjudicación del proyecto de las cocheras permitirá dibujar cómo serán las futuras instalaciones. Será ya labor de la próxima Corporación la ejecución de las obras.