Pilar Cernuda

CRÓNICA PERSONAL

Pilar Cernuda

Periodista y escritora. Analista política


No se entiende nada

28/10/2021

No se entiende que Pablo Casado haya iniciado una guerra sin cuartel contra Isabel Díaz Ayuso. Y que no vengan con que es cosa de Teodoro García Egea, porque fue Casado quien lo designó secretario general, quien le dio atribuciones para hacer y deshacer a su antojo –no siempre con buen criterio- y Casado el que lo mantiene contra viento y marea a pesar de que el secretario general ha provocado terremotos en regiones que estaban tranquilas hasta que Egea decidió mover peones para colocar afines.

Ayuso quiere ser presidenta regional del PP madrileño, como lo han sido los anteriores presidentes del gobierno regional, y Egea lo ha visto como un intento de rivalizar con Casado por el liderazgo nacional aunque Ayuso se ha hartado de decir que no tiene más objetivo que Madrid. Ojo, tiene derecho a aspirar a más, pero hasta el momento no se le ha visto ningún movimiento en ese sentido, más allá de que le planta cara a Egea todo lo que puede, como respuesta a que el secretario general le planta cara a ella. Sin embargo, si Casado cree de verdad que Ayuso aspira a su puesto, ha optado por la peor de las estrategias para neutralizarla.

Ayuso es hoy un activo clave para el PP, aporta votos de centro e izquierda que el PP jamás pensó tener, e incluso ha hecho algún agujero a Vox. Amenazar con que Ayuso podría no ser candidata en las elecciones autonómicas del 23 es garantía de derrota segura. Y cualquier dirigente nacional sabe que para ganar unas elecciones generales es clave ganar las autonómicas y municipales, que en principio van a ser un año antes que las generales. Si Sánchez las adelanta, Casado tendría opciones importantes de gobierno, porque el Psoe va de capa caída.

Génova se ha negado a celebrar el congreso regional de Madrid hasta bien entrado el 2022 para provocar el desgaste de Ayuso. Y, en otra maniobra también inaudita, el viernes podría presentar a la dirección regional un calendario de elección de gestoras municipales al margen de Ayuso. Operación suicida. Solo los miembros de la dirección nacional del partido piensan que Casado se fortalece con la debilidad de Ayuso.

García Egea piensa acudir a esa reunión de la dirección madrileña, y se puede apostar que Ayuso no estará callada aunque le apaguen el micro.

Egea siempre le recuerda a Ayuso que fue designada candidata al gobierno madrileño por Casado, y por tanto ella es la primera que debe aceptar las decisiones de la dirección nacional. Tiene razón … pero ha llovido mucho desde entonces, Ayuso ha demostrado liderazgo y que es capaz de arrasar en unas elecciones.

Pablo Casado muestra debilidad al arremeter contra ella: transmite que teme la fuerza y el gancho de quien, hasta el pasado mes de mayo, era un puntal de su equipo. Tiene miedo de que le supere en votos si se diera la ocasión.