Los equipos burgaleses, con metas dispares en la Regional

ROBERTO MENA
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Son cinco los representantes de la provincia que militan en esta categoría, donde algunos sueñan con la Tercera División y otros quieren evitar el regreso a la Provincial

Once inicial del Briviesca en uno de sus encuentros ligueros. - Foto: @cfbriviesca

La Regional de Aficionados echó a andar el pasado 21 de noviembre con 5 equipos burgaleses (Villarcayo, Briviesca, Salas, Inter Vista Alegre y Racing Lermeño), que han sido encuadrados en el grupo A1 junto a los representantes palentinos. Este fin de semana llegará la cuarta jornada liguera, la última de 2020, y la situación de los representantes de la provincia es distinta en todos los casos. También los objetivos con los que los clubes afrontan esta atípica temporada son dispares.

En la cúspide se encuentra el Villarcayo, que ha ganado sus tres encuentros y que comanda la clasificación. El Nela no contaba con un inicio tan positivo y celebra el arranque. El club de Las Merindades no renuncia a nada, aunque también advierte de que queda aún mucha temporada por disputar.

La otra cara de la moneda en el comienzo es el Racing Lermeño, al que muchos esperaban en los puestos de privilegio. Cuenta con jugadores de importancia para la categoría, aunque ha empezado con mal pie. Ha perdido sus tres encuentros, aunque no es su peor dato, ya que en estos momentos su puntuación en la tabla es de -3 puntos. Fue sancionado por alineación indebida en su partido ante el Briviesca.

El burebano es uno de los equipos que figura en todas las quinielas como aspirante a uno de los primeros puestos. Todo indica que irán a más y que serán una de las escuadras que al final de la campaña pelearán por una de las posiciones de privilegio que dan opción a pelar por el ascenso a la Tercera División. No han perdido, pero solo han ganado uno de sus tres encuentros.

Para el Inter Vista Alegre el único equipo de la capital, el inicio ha sido más que complicado. Justo cuando se iniciaba la competición llegó el cierre de todas las instalaciones deportivas de Burgos, por lo que no pudo entrenar en 15 días y su primer partido liguero llegó el pasado fin de semana con solo 3 entrenamientos. Es indudable que el nivel del equipo irá aumentado en cuanto pueda tener continuidad en el trabajo, ya que el miércoles encajó una abultada derrota (4-0) en un partido aplazado en Palencia en el que no pudo contar con todos sus efectivos.

Por último, el Salas, equipo que ascendió el pasado curso, también le está resultado complicado el arranque. Tiene su terreno de juego en obras, por lo que todos los partidos hasta febrero los jugará como visitante. Mantiene casi en su totalidad el bloque que la pasada campaña subió de la Provincial y el pasado fin de semana logró su primera victoria.