La Merindad de Montija controlará el consumo de agua estival

A.C.
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El Ayuntamiento invertirá 400.000 euros en instalar cerca de 2.000 contadores inteligentes para las 12 localidades donde gestiona el abastecimiento y que ahora carecen de medidores

El alcalde, Florencio Martínez (izquierda), y el teniente alcalde, Lorenzo González, ayer en las obras de la potabilizadora. - Foto: A.C.

Los presupuestos municipales de la Merindad de Montija volcarán todos sus esfuerzos en 2022 en el ciclo del agua, tanto en la mejora de la calidad del abastecimiento con la conclusión de la planta potabilizadora, como en la dotación de saneamiento y depuración a dos localidades más, Quintanahedo y Baranda. Además de ello, servirán para poner coto a los consumos excesivos de agua para riego y otras actividades no permitidas y que se producen especialmente en verano. Será gracias a la instalación de contadores inteligentes en alrededor de 2.000 viviendas de las doce localidades, cuyo abastecimiento depende del Consistorio.

El presupuesto municipal reserva 509.252 euros al capítulo de inversiones, pero las modificaciones de crédito previstas para incorporar remanentes (ahorros) del pasado año y anteriores elevarán esta cantidad a más del doble. A falta de datos definitivos, los nuevos contadores inteligentes supondrán un gasto de 400.000 euros al Consistorio montijano, que ahora solo puede cobrar una cuota fija sin penalizar los consumos excesivos, por carecer de cualquier aparato de medición del consumo del agua.

Así, la antigua ordenanza establece una cuota fija anual para las viviendas y explotaciones ganaderas de 46 euros, que sube a 133 para los negocios y a 665, para hoteles, hostales, el cámping y la residencia. La nueva, aprobada de manera definitiva el pasado diciembre y que se podrá aplicar ya en 2023, una vez estén instalados los contadores, establece cuotas fijas y un coste para los consumos que excedan del fijo. A las viviendas se les permitirá un gasto máximo mensual de 5 m3 al mes, por el que se abonarán 5 euros mensuales, 60 al año. A partir de esa cantidad, el recibo comenzará a subir. Hostelería y actividades industriales pasarán a abonar 10 euros mensuales por 35 m3, lo que equivale a 120 anuales. Esta misma cantidad se aplicará también a casas rurales, comercios, talleres..., pero para un consumo máximo de 10 m3 mensuales. La residencia y el cámpig pagarán 50 euros al mes, 600 al año, para un máximo de 75 m3 mensuales la residencia y 50, el cámping.

Con la nueva ordenanza y la medición de los consumos, el alcalde, Florencio Martínez, espera frenar el riego de jardines o huertas que , a su juicio, causan algunos problemas de abastecimiento en verano. Las que estrenarán contadores serán Agüera, Bárcena de Pienza, Barcenillas del Ribero, Bercedo, Quintanilla de Pienza, Quintanilla Sopeña, Revilla de Pienza, Villalázara, Villasante, Cuestahedo, Quintanahedo y Montecillo. Martínez invitará a instalarlos también al resto de poblaciones, que no dependen del Ayuntamiento.

La Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) será otra inversión que estará operativa «en verano tras los retrasos que ha acumulado por problemas en el suministro de la maquinaria», como explica el regidor. De los 839.150 euros de inversión que supone, los presupuestos de 2022 afrontarán los 316.000 pendientes. Las conexiones entre las captaciones de los ríos Cerneja y Remontanillo (Rupando) y la potabilizadora ya están ejecutadas, así como el edificio que protegerá la maquinaria y los decantadores. Con la ETAP se acabarán los problemas de turbidez que se agudizan en las épocas de lluvia. Una vez concluya la construcción, los dos operarios municipales llevarán el mantenimiento de la planta, capaz de elegir entre las dos captaciones, aquella que traiga el agua más limpia, y que adecuará su funcionamiento al nivel de turbidez.

En licitación. Junto a todo ello, el Consistorio acaba de sacar a concurso la instalación de colectores de aguas fecales en Quintanahedo y en la mitad sureste de Baranda. Las de la primera localidad se bombearán a la segunda para ir a una nueva depuradora con un sistema de filtro biológico. Asimismo, las obras con un presupuesto de licitación de 442.205 euros, de los que 104.000 aportará la Diputación, incluyen la canalización de aguas pluviales en Quintanahedo que contribuirán a evitar inundaciones. Las empresas pueden presentar ofertas hasta el día 9.