Siete institutos de la capital y la provincia imparten este curso clases de refuerzo a aquellos alumnos de cuarto de la ESO que están en riesgo de no obtener el título obligatorio al haberse suspendido entre tres y seis asignaturas en la primera evaluación, de las que una es Lengua y/o Matemáticas y otras dos materiales troncales de cada especialidad. A la medida se han acogido un total de 185 estudiantes, lo que representa un 26,7% más que hace un año, según los datos facilitados por el Dirección Provincial de Educación de Burgos.

Los centros que participan en este programa son el Diego Porcelos, Félix Rodríguez de la Fuente, Camino de Santiago, Comuneros de Castilla y Diego Marín Aguilera, en la capital, a los que se suman el Juan Martín El Empecinado, en Aranda de Duero, y el Montes Obarenes en Miranda de Ebro. Se trata de dos dotaciones menos que el curso pasado, cuando también lo ofertaron el Diego de Siloé y el Valle de Arlanza (Lerma). Fuentes del departamento provincial explican que en esta ocasión se han incrementado el número de horas de la medida y que estas se han concentrado en menos institutos al considera que resulta "más eficiente".

De igual modo, explican que las clases de refuerzo han comenzado antes, ya que el año pasado no empezaron hasta marzo, al tiempo que agregan que se ha evaluado previamente el perfil de los estudiantes con el fin de conocer su grado de interés en participar. Las clases de refuerzo se dan fuera del horario lectivo y abarcan dos ámbitos, el científico-matemático y el lingüístico-social, con diez horas extra en los centros de la capital y cinco en los dos de la provincia. Este año se ha incluido también la lengua extranjera entre las materias objeto de atención académica.

La medida denominada Acompañamiento a la titulación en cuarto curso de enseñanza secundaria obligatoria se enmarca dentro del Programa para la mejora del éxito educativo, que abarca más cursos de Primaria y Secundaria. Las clases extra comenzaron el 20 de enero y la asistencia a las mismas es voluntaria. Son los profesores y los equipos de orientación los que realizan la propuesta a los alumnos, que necesitan la autorización final de las familias para asegurarse de que existe un compromiso de asistencia. Además de esta actividad que se realiza durante el curso escolar, en julio también se oferta un programa de refuerzo para los exámenes de septiembre.