Una persona ingresada en el HUBU falleció ayer a causa de la enfermedad del coronavirus, por lo que Burgos suma cuatro días consecutivos con víctimas mortales de la infección. Todas han muerto en el complejo asistencial de la capital, lo cual evidencia también que es uno de los hospitales que más presión soporta ahora por la covid y, de hecho, es el que más enfermos infecciosos trata en planta (107 hoy, que son catorce menos que ayer). La UCI se mantiene con diez críticos por covid.
La buena noticia es que los nuevos positivos en SARS-CoV-2 caen con fuerza. Burgos notificó ayer 250 infecciones, que son menos de las declaradas al Ministerio de Sanidad en los tres miércoles previos. Esto permite que las incidencias acumuladas también se reduzcan, aunque siguen en valores muy altos: 1.249 y 558 en la provincia y 1.423 y 629 en la capital (en 14 y 7 días, respectivamente, y siempre por cada cien mil personas). En sendos casos son cifras propias de un riesgo extremo de transmisión del virus. El descenso ha de ser abrupto para poder entrar en umbrales que se aproximen a la normalidad.