Se buscan profesores de Secundaria

B.G.R. / Burgos
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En las últimas listas abiertas se demandan docentes de Filosofía, Lengua, Latín, Biología o Matemáticas. Las inminentes oposiciones dificultan aún más la cobertura de puestos

Oposiciones en Burgos el año pasado.

Tanto sindicatos como responsables de institutos de la capital coinciden en la afirmación: «Existe un déficit de profesorado en Secundaria y Formación Profesional». Bien es cierto que matizan que unas especialidades se encuentran más afectadas que otras por este problema, aunque el abanico de materias se va ampliando. La Dirección Provincial de Educación lleva publicando listas dinámicas (implantadas durante la pandemia  para agilizar el proceso administrativo de incorporación a las aulas) desde el pasado mes enero, lo que, según aseguran, pone de manifiesta esa falta de profesorado y las consiguientes complicaciones en la cobertura de las sustituciones por bajas u otras circunstancia de los profesionales en activo.

Lo más llamativo de esta situación es que en la última relación, que se encuentra ahora mismo abierta, figuran materias como Lengua, Matemáticas y Física y Química, que también se demandaron a principios de año, además de Filosofía, Latín, Física y Química, Dibujo, Francés, Música, Tecnología o Biología, sin olvidarse de otras más específicas de FP como madera y mueble, imagen personal u organización o procesos de mantenimiento, tal y como asegura la central STECyL. «Se están publicando listados del 1 al 5 de cada mes en base a los puestos que van quedando libres y, en caso de no haber candidatos, la administración recurre directamente al ECYL o a la UBU», explican Victoria Ibeas y Elena Ferrero de Pablo, representantes provinciales del sindicato.

Existen tres fórmulas para la contratación de profesores interinos, precisan las representantes de los trabajadores. La inicial son las listas ordinarias, que están asociadas a las especialidades que se incluyen en cada convocatoria de oposiciones, a la que se suman las extraordinarias cuando las primeras se agotan, pero que entrañan una proceso farragoso que se retrasa en demasía la selección de aspirantes. «Pueden tardar hasta dos meses y se están empleando para casos concretos como el Conservatorio de Música», afirman.

(Más información, en la edición impresa de este sábado de Diario de Burgos)