«Hay que ser previsor porque habrá muchas jubilaciones»

B.G.R. / Burgos
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Ainhoa Segura, nueva coordinadora del máster de Profesorado, asegura que los alumnos «salen bien preparados» para enfrentarse a las aulas

Ainhoa Segura, nueva coordinadora del máster de Profesorado, imparte clase en la especialidad de Lengua. - Foto: Luis López Araico

El máster universitario en Profesor de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de Idiomas, uno de los más demandados de la UBU y con más de 130 alumnos de nuevo ingreso el curso pasado, habilita a los estudiantes para ejercer la labor docente. Su nueva coordinadora, Ainhoa Segura, profesora del mismo en la especialidad de Lengua y Literatura, reconoce la existencia de ese «déficit» de personal a través de las charlas que los profesionales en activo imparten cada ejercicio a los alumnos matriculados.

«Es una cuestión que comentan de forma general y que motiva a los estudiantes por sus perspectivas laborales», explica esta profesional del área de Didácticas Específicas de la Facultad de Educación y que también imparte clase en los grados de Maestro en Educación Infantil y de Primaria. Reconoce en este sentido que la problemática se acentúa en determinadas asignaturas y advierte de que en los próximos años «habrá muchas jubilaciones», por lo que insta a las administraciones públicas a que «sean previsoras».

Segura explica que el perfil del alumnado responde al de graduados jóvenes que también han cursado másteres específicos en sus distintos campos de conocimientos. En este sentido, destaca el nivel de preparación con el que llegan y su implicación en las prácticas que realizan en los centros de Secundaria. No obstante, precisa que las motivaciones de cada uno «se quedan en su interior», moviéndose entre quienes tienen clara su vocación y los que ven el posgrado como una posibilidad más en el mercado de trabajo.

Estos estudios de habilitación profesional se enfrentarán próximamente a cambios normativos específicos, además de tenerse que adaptarse a la nueva ley de Educación (Lomloe). Su coordinadora explica que en España se sigue hasta el momento un modelo consecutivo, es decir, que primero se cursa la carrera y después el máster para adquirir las habilidades didácticas con las que trasladar su conocimiento al aula. Frente a este método, países del norte de Europa, como es el caso de Finlandia, combinan la formación general y pedagógica en el mismo plan de estudios. En cualquier caso, y a la espera de las directrices de las administraciones, considera que la profesión docente pasa por un momento en el que «no se siente tan valorada socialmente como antes y todo eso pesa a la hora de fomentar las vocaciones».