Lorena Bodas

Aguas Abajo

Lorena Bodas


Con M de Moro

04/03/2023

La historia es de las mujeres y de los hombres. Hace unos días leía esta frase en la contraportada de un libro sobre fotografías cuyas protagonistas son mujeres. Como sabrás, en marzo suelo dedicar esta columna a mujeres que me han llamado la atención, pero esta vez se la voy a dedicar a un hombre, porque eso es feminismo (la igualdad de todas las personas, por si no quedaba claro). 

También hace unos días me sorprendía una grata noticia: la concesión del Premio de las Artes de Castilla y León a Luis Moro. Segoviano, es uno de los primeros artistas que conocí cuando empecé a trabajar en la Galería, así como su obra. Curioseando por los cajones, descubrí unos grabados inspirados en las fuentes y esculturas del Palacio Real de la Granja de San Ildefonso. Me atraparon y aún hoy revivo aquella sensación cada vez que me acuerdo de ellos. Creo que la naturaleza y la atmósfera de La Granja son lo que invaden a Moro, porque sucumbe cada vez que le escucho hablar de este lugar. El agua, el cristal, seres marinos, figuras humanas… brotan de sus pinceles que domina con ambas manos. Animales migratorios, como las mariposas monarca, o como él, que pasa parte del año en México. Pienso que México y su historia también le tienen atrapado. Intuitivo, sensorial, sentimental… inquieto, trabajador, tenaz… es algo así como aquellos hombres del Renacimiento, que lo mismo te pintaban un cuadro que esculpían una escultura o diseñaban un duomo. Precisamente su «perfil multidisciplinar» ha sido muy tenido en cuenta por el jurado que le ha otorgado el premio. 

Se puede intuir que detrás de estas palabras hay una profunda admiración por el artista y la persona que hay bajo la capa de pintura. Conocer a Luis y a Olga, su pareja, es algo que tengo que agradecer a mi profesión. Así como al primer artista que conocí, aunque no lo sabía en aquel momento, y que bien merece un reconocimiento semejante: el hijo adoptivo de Aranda, Néstor Sanmiguel.