El turismo se está recuperando y de eso no cabe duda. Tras un 2020 de práctica desaparición, y un 2021 a medio gas, durante el presente ejercicio los datos van en aumento, y aunque todavía no se han alcanzado los niveles prepandémicos todos los indicadores van al alza. Y con ellos se observan fenómenos curiosos.

Los datos recabados por el Centro de Información Turística (Citur) que gestiona el Ayuntamiento de Burgos revelan que durante el mes de abril el total de visitantes que pasaron por sus instalaciones fue de 6.912, un dato todavía inferior a los 8.387 de 2019 pero infinitamente superior al apenas millar de 2021. Y entre ellos llama la atención que el Reino Unido se cuela como el cuarto origen más frecuente entre los extranjeros.

Francia sigue copando la mayor parte de los turistas de fuera de España, pues se lleva una cuarta parte del total, y parece imposible que nadie la desbanque a corto plazo. Por detrás de ellos vuelven a situarse Alemania y Países Bajos, que calcan los porcentajes de hace tres años, y en esta ocasión los británicos se asoman a las puertas del pódium.

En 2019 fueron los Estados Unidos los que figuraban en cuarto lugar y los belgas en el quinto. Ahora estos últimos ni aparecen y los norteamericanos han caído un puesto, desbancados por los procedentes del Reino Unido. En concreto fueron 138 los británicos que pasaron por las oficinas de turismo para solicitar información.

El ferry de santander. Frente a los datos globales, que siguen siendo inferiores a los de 2019, los de los ingleses ya son superiores a los de hace tres ejercicios. Desde el área de Turismo municipal apuntan a que "algunos de estos británicos llegan en ferry desde Santander y cruzan la Península parando en nuestra ciudad". En efecto, ya no es un fenómeno extraño contemplar matrículas del Reino Unido por las carreteras burgalesas, fundamentalmente la Burgos-Aguilar de Campoo. La apertura paulatina de diversos tramos de esta autovía ha acortado los tiempos de viaje y hace más atractivo atravesar la provincia burgalesa en lugar de la palentina para dirigirse al sur o al levante español.

La comparativa de los meses de abril, últimos disponibles puesto que los de mayo aún son muy provisionales, permite fijarse también en la procedencia de los turistas españoles. Madrid, País Vasco, Castilla y León, Cataluña y la Comunidad Valenciana vuelven a ser, por este orden, los principales orígenes de los visitantes. Porcentualmente los madrileños ganan peso al pasar del 19% al 23%, mientras vascos, castellanos y leoneses y valencianos se mantienen. Solo los catalanes parecen aflojar en su llegada a Burgos, pues han perdido tres puntos porcentuales en el reparto al caer del 11% al 8%

¿Es un fenómeno puntual o una constante que veremos confirmarse en los próximos meses? Nuevamente desde el área de turismo apuntan: "Creemos que no se puede hablar de tendencias. Desde la oficina notamos que las variaciones de visitantes están algo enrarecidas por la situación covid".

Por ello emplazan hasta el final del verano "para tener una perspectiva más amplia de las variaciones y las tendencias" y así poder concluir si el turismo que llega a la capital burgalesa está cambiando.