La plantilla del Hereda San Pablo se desintegró por completo con el descenso a LEB Oro. Ninguno de los jugadores del primer equipo continuará a las orillas del Arlanzón y la mayoría se ha buscado la vida en otros clubes. De los que acabaron la temporada, solo Aleksej Nikolic y Cady Lalanne todavía no han firmado con ningún equipo.

Cinco de los 14 jugadores que estaban en el plantel al final del curso pasado han buscado acomodo en la ACB: Vítor Benite se fue al Gran Canaria; Xavi Rabaseda, al Bilbao Basket; Marc García, al Río Breogán, Dani Díez se pondrá a las órdenes de Joan Peñarroya en el Baskonia y Alex Renfroe acaba de firmar por el Covirán Granada. Los tres españoles tuvieron ofertas sobre la mesa para continuar en Burgos y Díez estuvo cerca de renovar, pero fue imposible competir con un proyecto de Euroliga.

Otros dos hombres que también podrían haber seguido en el proyecto, como Maksim Salash y Kristian Kullamae, han puesto rumbo al este. El bielorruso jugará en Nizhny Novgorod (Rusia), donde ganó con el San Pablo la segunda Champions, mientras que el estonio defenderá los colores del Lietkabelis lituano.

Más al sur, en Turquía concretamente, repetirán experiencia Jarell Eddie y Anthony Clemmons. El ala-pívot americano ha firmado por el Konyaspor, con el que tratará de recuperar su mejor versión, y su compatriota jugará en el Bursaspor.

Además de liga, también compartirán vestuario Tarik Phillip y Kareem Queeley, ya que ambos han fichado por los London Lions, con los que disputarán la Eurocup. Phillip regresa a 'su' país tras no brillar en Burgos y Queeley probará suerte en busca de más minutos.

Mucho más exótico es el destino de Landry Nnoko, quien competirá en la liga de Corea del Sur con los Suwon KT Sonicboom, precisamente el equipo del que llegó Cady Lalanne al San Pablo. Casi todos se han buscado la vida en un país u otro después de un año trágico en Burgos.