La industria planta cara al paro

L.M.
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Economistas, empresarios y sindicatos coinciden en señalar al sector secundario como el responsable de la caída del desempleo en febrero, un oasis en plena escalada a nivel nacional

Empresas como Kronospan, en la fotografía, han vuelto a niveles de producción altos tras el periodo más crudo de pandemia. - Foto: Alberto Rodrigo

Con la provincia soportando la tercera ola de la pandemia, con el sector servicios con el agua al cuello por culpa de las restricciones y sin concreciones sobre la desescalada, nadie en su sano juicio hubiera podido imaginar que el paro, que desde marzo de 2020 no ha hecho sino dispararse hasta niveles de hace cuatro años, fuera a bajar en el mes de febrero. 

Pero así fue, el desempleo logró reducir la presencia de burgaleses por primera vez en un año, y apenas fueron una docena las provincias que lograron romper la tendencia a nivel nacional. Además, para rizar más el rizo, la caída no se concentró, como ha sucedido en otras ocasiones, en uno o dos sectores, sino que lo hizo en los cuatro que conforman la economía -sin contar con el colectivo sin empleo anterior- a pesar de la que está cayendo a día de hoy.

El Decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Burgos, Juan Bautista Delgado, achaca este suceso a un «efecto arrastre» de la industria sobre el resto de sectores «Para nada esperábamos que el paro se fuera a comportar de esta manera.Estamos sorprendidos», expresa el decano.La misma explicación tienen en el Colegio de Economistas, donde destacan la fortaleza industrial de la provincia, con alrededor del 30% del PIB, frente a la media del 16% a nivel nacional. «Es el hecho más diferencia con el resto de territorios del país, el peso de la industria es el doble», explica su decano, Carlos Alonso de Linaje.Otro de los factores que apunta es la menor influencia que tienen los servicios en la economía, y que provoca que en provincias costeras o donde el turismo tiene un gran valor, su PIB se haya resentido aún más».

Uno de los aspectos que más ha sorprendido de la estadística del Ministerio de Trabajo es la caída del paro en el sector servicios, máxime cuando en Navidad, época de compras por excelencia, no se rebajo esta cifra.«Restauración y hostelería llevan cerrados más de un mes, los trabajadores siguen en ERTE y no pueden ser despedidos, por lo que el panorama no ha cambiado», indica Alonso de Linaje, que aunque asegura que la bajada del paro no le extrañó, confiesa que sí le sorprendió que el dato final «fuera tan bueno».

En profundidad. Dentro del ámbito empresarial, desde la Cámara de Comercio califican a Burgos como «un oasis en medio del desierto» especialmente por la mala situación que atraviesa el sector servicios. «Es el camino que tenemos que seguir.Esperemos que con la vacuna y las medidas para relanzar el turismo se vuelvan a recuperar los cientos de trabajadores que están en ERTE o se han perdido estos meses», espera Antonio Méndez Pozo. Sobre la industria, el presidente de la entidad admite que está funcionando«perfectamente», mientras que la construcción tiene una actividad«alta» y la agricultura «sigue muy bien». «Tenemos que centrar los esfuerzos en todo lo que depende del turismo como hostelería, hoteles o comercios», apunta.

Miguel Ángel Benavente, presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE), pone en valor la «enorme diversificación» de la economía a lo largo y ancho de la provincia, un equilibrio que, admite, permite que el PIB no sufra tanto como en otros territorios.«Lo más positivo que tenemos es el aumento de más de 400 afiliados a la Seguridad Social, o lo que es lo mismo, el 65% del crecimiento de toda Castilla y León», recalca Benavente.

En las filas sindicales, en CCOO su secretario provincial destaca nuevamente el importante peso que tiene la industria en la economía burgalesa, un hecho del que carecen otras provincias. «La construcción también está funcionando muy bien, así como la agricultura, que está generando empleo», admite Ángel Citores, que no obstante pide tomar«con mucho cuidado» los datos y esperar a ver cómo evoluciona la economía durante los próximos meses. Su homólogo en el sindicato UGT, Pablo Dionisio Fraile, -que también reclama no lanzar las campanas al vuelo- indica que el dato le sorprendió y centra de nuevo en la industria la responsable de tirar del resto de sectores.«Las cifras no son espectaculares, pero son muy dispares a lo que preveíamos nosotros.El arrastre del sector secundario está motivando al resto y esperemos que siga así», sentencia.