Aranda de Duero ha enfilado la senda de la reactivación en materia turística tras dos años complicados por el estallido de la pandemia. La capital ribereña ha cerrado 2022 con un total de 30.543 visitantes, lo que supone un 50% más que un año antes, cuando en la oficina de turismo municipal registraron 20.359 consultas. Octubre fue el mes con más movimiento al contabilizarse 4.340 visitas, a buen seguro relacionadas con el auge experimentado por el turismo ligado al mundo del vino. Le siguen agosto, con 4.272; julio con 3.054 y abril con 3.018, por haber coincidido con los festivos de la Semana Santa, una de las épocas más fuertes para el turismo de interior. En el lado opuesto se sitúan enero con 815 consultas, diciembre con 1.457 y febrero con 1.523.
A pesar del fuerte aumento registrado durante 2022, año en el que Aranda ha ejercido como ciudad europea del vino, los datos reflejan que el turismo en la capital ribereña todavía no ha alcanzado los niveles en los que se movía antes de la pandemia. Si se toma 2019 como año de referencia, en la oficina municipal contabilizaron 35.653 consultas, 5.110 más que en el ejercicio que se acaba de cerrar.
Únicamente en octubre de 2022 se mejoró el dato de 2019, con 4.340 visitas frente a 3.429. El resto de meses del año pasado terminaron con menos afluencia: en agosto hubo 1.318 consultas menos en la oficina ubicada en la Plaza Mayor, en junio la diferencia fue de 860 y en noviembre de 558, entre otros.
En cuanto a la procedencia de los turistas que eligen descubrir Aranda, ganan por goleada los madrileños, que representan alrededor del 30% de las visitas totales. Si se analizan los datos del último trimestre, en segundo lugar se sitúan los castellanos y leoneses (1.080), seguidos de catalanes (697) y valencianos (469). Asimismo, hubo 313 consultas por parte de viajeros extranjeros, entre los que se incluyen franceses, finlandeses, británicos, argentinos, venezolanos, estadounidenses o canadienses.
3 ofertas para los museos. Y, mientras, los museos continúan cerrados a la espera de que se concluya el proceso administrativo para adjudicar la gestión de la Casa de las Bolas y el Museo de Arte Sacro, situado en la iglesia de San Juan Bautista, a una empresa externa.
Tres firmas han presentado ofertas económicas con el objetivo de hacerse con este contrato. A una de ellas se le ha requerido que subsane una serie de deficiencias en la parte relativa a la documentación.
Una oportunidad de oro "tirada". El grupo municipal socialista cuestionó ayer el balance realizado hace unas semanas por la concejala de Promoción, Olga Maderuelo, en relación con la Ciudad Europea del Vino. Consideran que los datos no se ajustan del todo a la realidad. Por ejemplo, los 13 millones de euros en repercusión económica. "Nos preguntamos cuántos de esos millones han reportado en nuestra localidad. A los comercios no les salen las cuentas", aseguró la concejala Laura Jorge.
Asimismo, criticó que no se hayan celebrado ni Fiduero ni Gastroduero. Y continuó: "Los museos cerrados y sus ansiadas luces rojas iluminando el río Duero, ¿las veremos o no? ¿Cuándo y ya para qué?".