Un poco de sangre por aquí y de animales muertos o excrementos por allá; nombres y letras que aluden a descuartizamientos, muertes violentas, tributos al diablo o temas escatológicos, y un atuendo propio de Halloween o de una película de bajo presupuesto. Las bandas que participan en el Burgore DeathFest, que este año celebra su tercera edición, no sirven para conciliar el sueño ni como hilo musical para un hospital. Los grupos de música extrema buscan provocar e incomodar mientras disfrutan con sus letras, decibelios y puesta en escena excesiva.
Algunos dirán que se han pasado de rosca, que sus canciones son de mal gusto o que son unos descarriados. Nada que no hayan dicho antes con las caderas de Elvis Presley, el rock and roll o el punki. Son conciertos muy bestias que no pegan en una clase de yoga. Pero como no todo va a ser Amaral y Sonorama, Iron Maiden o Zurbarán las bandas que apuestan por el heavy más intenso no solo tienen su público, sino que también tienen un festival propio. De los pocos que hay en España de este género, por otro lado. El BurgoreDeathFest aglutina a grupos que practican géneros como el black metal, el grindcore, death grind, death metal o slam grind con un punto divertido e incitador.
El festival que se celebra en Burgos lo organizan miembros de la banda Nasty Surgeons (Cirujanos Desagradables) por el propio deseo de contar con esos grupos en la ciudad: «Es el festival al que nos gustaría ir. Pero como no es fácil, porque de heavy tienes la oferta que quieras pero estas músicas, al ser más alternativas, cuesta encontrarlo en la programación, decidimos crear nuestro propia cita. Y lo hacemos sin ayudas, financiándonos con las entradas y la venta de camisetas», afirma Raúl Puente recordando que el año pasado reunieron a más de 300 personas.
Para el 9 de septiembre, la fecha de la tercera edición, traen a la sala Andén 56 a Haemorrhage (Hemorragia) los checos Gutalax(nombre de un medicamento para el estreñimiento), Barbarian Prophecies (Profecías Bárbaras), los ingleses Basement Torture Killings (Asesinatos por Tortura en Sótanos), Balmog (Bálsamo), Osserp, Lethargic, Oxicorte y Slamentable, además de los burgaleses.
Nasty Surgeons aprovecharán para presentar el que es su cuarto disco, Anatomy lessons, un CD tan sangriento como la apariencia que presentan en directo. Lo que hacen es death grind, un estilo mucho más frenético que el death metal, marcado por la distorsión de las guitarras y una voz rasgada. Sus canciones tienen que ver con el nombre de la banda, algo que dificulta la creación de letras: «Me paso el día buscando enfermedades y cosas extrañas del cuerpo. Reconozco que es lo que más me cuesta, pero como no haga un grupo de recetas de cocina no me queda otra», bromea.
Las entradas anticipadas se venden en: Jarra'n'Heavy, Club Ciclista Burgalés, Golden Rock & Beer, Comuneros y la tienda E330 en Burgos; en Potencial Hardcore-Punk de Madrid y en Base Record Production, de Caudete (Albacete).