La inversión en plazas de aparcamiento gana atractivo para los pequeños ahorradores. También en Aranda de Duero, donde varias inmobiliarias constatan que se trata de un mercado que, por lo general, «funciona bien» ya que la compraventa de garajes «siempre es un valor refugio». Así se pronuncia la responsable comercial de Liverso, Isabel Martínez, al tiempo que destaca que la demanda se mantiene estable, con un ligero aumento de cara a los meses de invierno, mientras que no existe demasiada oferta en la capital ribereña.
Donde más dificultades se dan para encontrar un garaje libre es en el centro de Aranda porque muchos edificios, debido a su antigüedad, no se construyeron con aparcamientos. A ello se suma que las plazas de párking en la vía pública tampoco abundan. Así, entre unos factores y otros, el precio de un garaje en el casco histórico ronda en este momento los 20.000 euros. El responsable de Alfa Inmobiliaria, Javier Guijarro, apunta que en algunos casos puede ascender a 25.000. Y desde Liverso indican que ha habido compras de hasta 30.000 euros por un aparcamiento en esta zona, más concretamente en puntos como la calle Empedrada o San Antonio. «El precio varía mucho. En el centro el aparcamiento está más limitado que en otros barrios y, además, las familias suelen tener dos coches», explica Martínez.
En este sentido, Guijarro añade que «en el caso histórico se paga más porque hay menos párking y, al final, todos vamos al centro. Unos porque viven ahí y otros por trabajo», sin olvidar que «hay menos garajes que en otros barrios de Aranda» y que es donde mayor demanda de plazas existe.
En el resto de barrios de la capital ribereña, los precios resultan más asequibles. Según los datos que aporta el responsable de Alfa Inmobiliaria, en Santa Catalina oscilan entre 10.000 y 12.000 euros, mientras que en el Polígono Residencial o La Estación se sitúan en torno a los 15.000 euros.
En el caso del alquiler de plazas, el importe mensual medio que se afronta alcanza los 60 euros. Con matices, claro. «Hay párkings por 45 euros y otros por 70 o 75», como precisa Martínez, en función de la zona y del tamaño. Algo que se nota, sobre todo, en los edificios más antiguos, donde las plazas suelen ser más pequeñas porque «antes los coches no eran tan grandes». Sea como fuere, desde Liverso sostienen que, normalmente, los garajes «están siempre alquilados» y que no hay mucha oferta ya que las plazas se suelen arrendar directamente entre los vecinos y no llegan a las inmobiliarias.
Piso y garaje en pack. En el caso de las promociones nuevas, crece la tendencia a buscar piso con garaje en un mismo pack y así ganar en comodidad en el día a día y, sobre todo, evitar dar vueltas para encontrar una plaza libre ya que en ciertas calles de Aranda cada vez resulta más complicado dar con un hueco y sólo existe un párking público en los Jardines de don Diego (de gestión privada). De hecho, «siempre hay gente que quiere dos plazas», como destaca Martínez. Eso sí, todo depende de la economía de cada hogar. Así lo recuerda Guijarro, quien apunta que mientras que la vivienda es un bien de primera necesidad, el garaje no lo es tanto. «Va un poco en los bolsillos. Quien puede lo alquila o lo compra. Pero si la economía va más justa, el coche duerme en la calle».
Finalmente, desde Liverso comentan que no han notado un boom de alquiler de plazas pese a todas las obras que se están realizando y la 'eliminación' temporal de aparcamientos, como sucede en los Jardines de don Diego.