Desde Burgos y Madrid miran de reojo y con envidia al Principado. Allí, el MoraBanc Andorra consiguió ayer el ascenso directo a la Liga Endesa al finalizar como primer clasificado de la LEB Oro, una plaza a la que aspiraban también el Hereda San Pablo y el Movistar Estudiantes a principio de temporada por plantilla y presupuesto. Sin embargo, burgaleses y madrileños han pagado caros sus altibajos a lo largo del curso y se han visto condenados a pelear por el ascenso a través del camino largo. El WiZink Center acoge hoy -12.30 horas- un duelo en el que se pone en juego el 'factor cancha' en el play off. Si los azulones ganan en la capital, se asegurarán disputar un partido más en el Coliseum en las eliminatorias previas a la Final Four.

Tanto el San Pablo como el Estudiantes han vivido meses complicados. Han sufrido cambios en las plantillas y en los banquillos en busca de un revulsivo que les permitiera llegar vivos al tramo final del curso. En ese ejercicio de supervivencia, los castellanos parecen haber acertado desde la llegada de Curro Segura y los fichajes invernales, pues aterrizan en Madrid con una dinámica ascendente de juego y resultados. Han ganado siete de sus últimos ocho partidos y en la segunda vuelta han tumbado con suficiencia a varios de sus rivales directos.

Más dudas arrastran los colegiales en el tramo decisivo del curso.  Hace algo más de un mes, la directiva cesó a Javi Rodríguez y apostó por Alberto Lorenzo para el banquillo. En las últimas jornadas, han sido incapaces de encadenar victoria y, de hecho, vienen de perder (74-66) ante el Zunder Palencia, un rival al que el San Pablo pasó por encima sin contemplaciones. También cayeron en la trampa del Albacete Basket y del Tau Castelló. Eso sí, sus últimos cuatro partido en casa los han saldado con victoria.

(Más información, en la edición impresa de Diario de Burgos de este domingo)