GSK invierte en Aranda 4 millones en 6.000 placas solares

L.N. / Aranda
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Con este nuevo proyecto, la multinacional farmacéutica generará más de 5.700 MWh al año en energía renovable, lo que supone un 30% del consumo de la fábrica y una reducción de 1.500 toneladas de CO2

Las placas solares ocupan una superficie aproximada de 37.000 metros cuadrados en la planta de GSK en Aranda de Duero. - Foto: DB

?El tejido industrial de Aranda de Duero intensifica su apuesta por las energías renovables. La guerra de Ucrania, la crisis de las cadenas de suministros o la inflación han puesto de manifiesto la importancia de los mercados energéticos, que se han visto sometidos a una elevada volatilidad. Ante estas circunstancias, y con la factura de la luz alcanzando cotas insólitas entre los gastos fijos de las empresas, cada vez son más las compañías que se decantan por fórmulas que les permitan mejorar su eficiencia energética. A ello se suma su compromiso con el medio ambiente y la reducción de emisiones. Así, de la confluencia de estos factores surgen inversiones de relevancia en la capital ribereña. Como la que ha acometido recientemente la multinacional farmacéutica GSK, que ha destinado más de cuatro millones de euros a la instalación de un huerto solar compuesto por alrededor de 6.000 placas solares y que han colocado en la planta que tienen en Aranda de Duero.   

Según detallan fuentes de la compañía, las obras se pusieron en marcha en el segundo trimestre de este año. En total, las placas ocupan una superficie aproximada de 37.000 metros cuadrados. Los paneles solares han quedado distribuidos en dos zonas. Por un lado, en el párking de la fábrica. Más concretamente, sobre las marquesinas que cubren los aparcamientos de vehículos, bicis y motos. Y, por otro lado, también se han instalado placas en una zona situada en el terreno final de la parcela. 

No son las únicas cifras de envergadura que arroja este proyecto. Gracias a este huerto solar, en GSK calculan que podrán generar más de 5.700 MWh al año en energía renovable, lo que supone un 30% del consumo energético actual de la planta y una reducción de casi 1.500 toneladas de CO2. «La estrategia de sostenibilidad de GSK es clara: minimizar nuestro impacto ambiental a través de, por ejemplo, la reducción de las emisiones de carbono y realizando importantes inversiones en energías renovables», remarcan desde la multinacional farmacéutica. 

En este sentido, fuentes de la compañía subrayan que la instalación de 6.000 placas solares en su planta de Aranda de Duero refleja «una excelente muestra del progreso que estamos consiguiendo en nuestra estrategia de sostenibilidad medioambiental». Tal como recuerdan, ya en noviembre de 2020, GSK anunció los objetivos que se marcaban en este ámbito y que después han actualizado este año. 

Entre ellos, figura la meta de tener «un impacto neto cero en el clima» y «un impacto neto positivo en la naturaleza». Un horizonte que aspiran a alcanzar con diversas acciones y la mirada puesta de aquí a los años 2030 y 2045. Al fin y al cabo, desde la farmacéutica destacan que no sólo están comprometidos con la salud de más de 2.500 millones de personas en todo el mundo, sino «también con la salud del planeta». De hecho, en los últimos años han puesto en marcha diversas medidas como la utilización de maquinaria más eficiente o la instalación de estaciones de carga de vehículos eléctricos. En noviembre del año pasado, fuentes de GSK ya precisaron que en los últimos 15 años habían logrado una disminución de un 11% en el gasto de electricidad, gas natural y gasoil.  

Además de la farmacéutica, empresas como Tecnoaranda también han ejecutado inversiones de calado en placas solares. En su caso, el importe asciende a 624.000 euros. Mientras, Pascual valora colocar paneles en todas las cubiertas de su fábrica donde sea posible y Michelin también lo estudia.