La Gerencia de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Burgos ha decidido «paralizar» el realojo de las trece familias que aún permanecen en el poblado del Encuentro. Esa es la decisión que se ha adoptado después de que hace poco más de diez días, el fin de semana del 9 y 10 de marzo, fuera okupada una vivienda municipal, ubicada en el barrio de Gamonal, que se iba a entregar precisamente a una de las pocas familias que permanecen aún en el único enclave chabolista que sigue en pie en la ciudad.

Al parecer, la familia que ha ocupado el piso de Gamonal (no vivía en el Encuentro) debía conocer que esa vivienda era propiedad del Ayuntamiento y, según apuntan fuentes municipales, decidieron entrar en ella nada más terminar las obras de reforma que se estaban realizando en la misma (los anteriores inquilinos la habían dejado en muy malas condiciones). Es probable que incluso supieran que este piso iba a ser para de unas las familias que permanecen en el poblado y se apresuraron a entrar en cuanto supieron que se encontraba en un estado óptimo.

Lo que se ha hecho ya por parte del Ayuntamiento es iniciar el procedimiento judicial que permita que la vivienda sea desalojada y, en cualquier caso, la decisión es no proseguir con el programa de realojo hasta que el piso quede vacío. Parece que la Gerencia de Servicios Sociales quiere también de esta manera presionar y trasladar la responsabilidad a los okupas para que salgan del piso y permitan que la familia a la que se iba a destinar esta alojamiento, que evidentemente lo necesita y tenía esta expectativa, pueda entrar a vivir.

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