Un potente dispositivo policial cercó en la tarde noche del jueves la pedanía de San Vicente de Villamezán, perteneciente al Valle de Valdebezana. Lo ocurrido cerca de las siete de la tarde y la llamada de alerta de varios vecinos a la Guardia Civil desencadenó la operación que concluyó hacia la una de la madrugada con la detención de un vecino de 42 años por haber sido autor del presunto delito de amenazas con un arma prohibida.
El varón, visiblemente alterado amenazó a vecinos desde una terraza de su vivienda y disparó dos tiros al aire, lo que encendió todas las alarmas. La Guardia Civil le planteó realizar un registro voluntario de su casa y así accedió en presencia de un abogado. El objetivo era hallar la supuesta arma, que desde la lejanía los vecinos no pudieron ver, pero sí escuchar. Los agentes localizaron en la casa dos pistolas detonadoras, iguales que las reales, pero que solo emiten ruido y carecen de balas. Su tenencia está prohibida. Días antes había dicho públicamente que tenía armas en su propiedad. Fue detenido por el delito de amenazas, como confirman desde la Comandancia de la Guardia Civil y puesto a disposición judicial.