25 años latiendo por México y Burgos

D. ALMENDRES / Burgos
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El Centro Cultural del país centroamericano vive este año su aniversario más especial con el deseo de fortalecer en el futuro el sólido vínculo creado entre su tierra de origen y la capital castellana a lo largo de un cuarto de siglo

El Centro Cultural Mexicano celebra este mes de octubre su XXV aniversario. - Foto: Patricia

El Centro Cultural Mexicano en Burgos está de enhorabuena después de cumplir en este mes de octubre su XXV aniversario como asociación. En el camino quedan un sinfín de actividades y de eventos realizados, así como los buenos momentos compartidos con la sociedad castellana con el firme deseo de prolongar esta comunión en el futuro.

Ese es el espíritu que mueve a un colectivo plenamente integrado en las costumbres burgalesas desde del momento en el que una inquieta mujer llamada Lorena López propuso la creación del Centro en el ya lejano 1998. Aquella mexicana de Veracruz conoció años atrás a un hombre de Rioseras y, una vez asentada en Burgos, no dudó en abrirse a su ciudad de adopción.

Entonces fueron seis los integrantes de una nueva asociación que más de dos décadas después cuenta con 60 familias censadas. En sus listados también hay protagonismo para socios de otros países latinoamericanos como Venezuela, República Dominicana o Argentina, además de españoles.

La asociación programa numerosas actividades en este tramo final de año. La asociación programa numerosas actividades en este tramo final de año. - Foto: Patricia

La vida hizo que Lorena López volviera a su país, pero aquella entusiasta dejó aquí su legado y se llevó a la ciudad en el corazón. Tanto, que en su regreso a casa fundó el Centro Cultural Mexicano Burgalés. A este lado del océano, la asociación mira al futuro con alegría y optimismo. 

Sonia Patricia Villegas, también socia fundadora, recuerda aquellos comienzos en los que contaron con la colaboración de las cajas de ahorro locales para llevar a cabo sus iniciativas. «Empezamos con conferencias y también nos reuníamos en bares como el Tequila o el Salamanca. Después, en la época de Ángel Olivares como alcalde nos cedieron un local en Villímar y contamos con un millón de pesetas de entonces -6.000 euros- para acondicionar la sede», explica.

Han pasado muchas cosas desde entonces y, paso a paso, la asociación imprimió un sello cada vez más reconocible en el día a día de la sociedad local. Por ejemplo, Sonia Villegas rememora aquellas primeras experiencias en el Día del Burgalés Ausente en las que se agotaba la comida. «Desde el principio tuvimos una muy buena aceptación porque aquí gusta la cultura mexicana», explica.

El Centro Cultural de México vive este año su aniversario más especial con el deseo de fortalecer en el futuro el sólido vínculo creado entre su tierra de origen y la capital castellana a lo largo de un cuarto de siglo. El Centro Cultural de México vive este año su aniversario más especial con el deseo de fortalecer en el futuro el sólido vínculo creado entre su tierra de origen y la capital castellana a lo largo de un cuarto de siglo. - Foto: Patricia

Después el nombre del colectivo lució orgulloso en otros eventos fundamentales en la cultura local, como Carnavales o San Pedro. Todo desarrollado desde la naturalidad y la proactividad de estos burgaleses de pleno derecho que ya disfrutan de la colaboración de las nuevas generaciones.

Día de Muertos. El Centro Cultural Mexicano de Burgos está de fiesta y se prepara para celebrar un intenso programa de actividades hasta final de año. La participación en el Festival Intercultural será una gran ocasión para mostrar a los burgaleses lo mejor de la tradición artesana y gastronómica del país, si bien gran parte de la atención se centrará en la próxima celebración del Día de Muertos.

Esta fecha, el 2 de noviembre, es muy especial para los mexicanos y la asociación ha diseñado un amplio programa con conferencias, charlas y talleres de manualidades dirigidos a los más pequeños, una actividad que ya cuenta con el interés mostrado por algunos colegios de la ciudad en participar. «La muerte siempre es triste, pero en todas las casas de México se monta un altar en honor a los difuntos y este día se vive como una fiesta», explica. 

Los burgaleses podrán conocer de cerca esta tradición en las próximas semanas. Al fin y al cabo, una de las grandes razones de ser de colectivos como el Centro Cultural Mexicano es aprovechar al máximo las posibilidades que ofrece abrirse a la sociedad que les ha acogido y, a la vez, compartir con ella las virtudes y tradiciones de sus países de origen. «Está claro. Nosotros estamos en todos los eventos de la ciudad que podemos. Hay que participar de la vida de Burgos», subraya Villegas.