El Ministerio de Fomento no dejará aislada la Y vasca del resto de España pero la conexión con la meseta no será a la alta velocidad que esperaban sino mediante un tercer hilo, esto es, la adaptación de una o las 2 vías actuales para que puedan circular por ellas trenes tanto de ancho ibérico como internacional. Esa fórmula provisional de conexión entre Burgos y Vitoria, vía Miranda de Ebro, se aplicará también para enlazar la ‘isla’ vasca con la frontera francesa, concretamente entre Astigarriaga e Irún.
Los planes inmediatos del departamento de Ana Pastor no fueron desvelados por la propia ministra sino por la consejera de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno vasco, Ana Oregi, durante una comparecencia en el Parlamento regional el pasado miércoles. No obstante, añadió que Fomento no descarta la implantación de la alta velocidad, sino que lo hará «posteriormente» y según las «disponibilidades presupuestarias» del momento. En la actualidad, se están diseñando todos los subtramos que integrarán la plataforma. Según Oregi, están aprobados los «proyectos básicos» y se están redactando ya los constructivos.
La instalación de un kilómetro de tercer carril ronda el millón de euros si no hay que cambiar traviesas y 2 si hay que hacerlo, frente a los casi 10 millones del TAV. En el caso del proyecto Burgos-Vitoria, solo el coste de la plataforma está calculado en 1.308,44 millones, debido a la enorme complejidad del proyecto en algunos subtramos, como el que va de Ameyugo a Pancorbo. Fomento ha reservado en los presupuestos del próximo año 95 millones y ha pedido a Europa que financie al menos un 20% de esa inversión, de momento sin éxito.
Una opción desde 2013.
La posibilidad de conectar la meseta y el País Vasco con un tercer hilo o carril ya salió a la luz pública en 2013. No obstante, Fomento descartó entonces que fueran esos sus planes e insistió en que seguía adelante con el proyecto de la alta velocidad. En esa misma postura se había mantenido hasta la revelación de Ana Oregi en el Parlamento vasco.
La comparecencia de la consejera sirvió para informar principalmente sobre la marcha de la Y vasca, donde se ha ejecutado ya «cerca de un 80%» de la obra, en la que participan tanto Adif como la administración autónoma vasca, y mantuvo 2019 como fecha de puesta en funcionamiento. Antes de final de año estarán concluidos 7 nuevos tramos.