Vuelven a investigar al criadero de perros de Melgar

DB
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Una persona denunció la venta de una cachorra de boxer en estado de extrema delgadez y con un microchip colocado de manera fraudulenta

Vuelven a investigar al criadero de perros de Melgar - Foto: GC

La Guardia Civil, en el marco de la Operación “CHENILBUR”, investiga a D.O.U. (28), Z.M.S. (23) y J.A.M.S. (49), como presuntos autores en distinto grado de autoría de los delitos de estafa, intrusismo profesional, falsedad documental y maltrato de animales. El pasado mes de agosto el SEPRONA de la Guardia Civil de la Comandancia de Burgos tenía conocimiento de una posible estafa, según informaba la persona perjudicada desde Navarra, en la compra de un perro, todo ello relacionado con un criadero asentado en la localidad de Melgar de Fernamental.

Cabe recordar que estas instalaciones y su responsable venían siendo investigados por esta Unidad desde meses atrás, y fue en el mes de julio último cuando Agentes de esta Unidad llevaron a cabo la fase de explotación. Las pesquisas llevadas a cabo ahora, a raíz de esta denuncia presentada por el adquiriente de una cachorra de raza boxer, pusieron en aviso a los guardias civiles conociendo que la venta del animal podría ser una estafa. Según el informe de un veterinario particular al que fue llevado el animal, éste presentaba una extrema delgadez, se encontraba muy débil y claramente desnutrida y portaba garrapatas y pulgas; además carecía de pasaporte canino de identificación.

El ejemplar portaba el preceptivo microchip si bien, en el momento de la compra, no había sido dado de alta aún en la base de datos de identificación de animales de compañía, existente en Castilla y León. Las pesquisas practicadas han permitido conocer que fue comunicado posteriormente, por un veterinario en connivencia con el criador, quien supuestamente realiza fraudulentamente el implante del microchip, facilitando más tarde los datos al facultativo para el alta de los perros, alterando datos esenciales en el registro como el titular y la fecha del implante.

Al criador y la colaboradora se les considera presuntos autores de un delito de estafa, y al primero también de intrusismo profesional y maltrato animal. Al veterinario de un delito de falsedad documental.

La desnutrición del animal en una etapa tan temprana generan lesiones que menoscaban gravemente su salud, pudiendo dejar secuelas de por vida, todo ello a consecuencia de la deficiente cría del cachorro.

Las diligencias instruidas han sido presentadas en el Juzgado de Instrucción Nº 5 de Navarra.