Hace unos días la Diputación de Burgos firmó un acuerdo para aportar 100.000 euros para ‘LUX’, la exposición inaugurada el pasado martes por el rey en la Catedral. Las Edades del Hombre también ha conseguido financiación del Ayuntamiento (150.000 euros), Cámara de Comercio (25.000) y Fundación VIII Centenario (otros 25.000).

La Diputación, cuyo cometido es ocuparse y preocuparse de las poblaciones de menos de 20.000 habitantes, destina fondos para una actividad que se ubica en una ciudad de 175.000. Era noviembre de 2019 cuando el pleno de esta Corporación reclamó, al igual que hizo el Ayuntamiento, que la Catedral fuera sede única de esta XXV edición de Las Edades del Hombre, con la posibilidad de disponer de otras subsedes en la provincia. Finalmente, las otras sedes, con la lógica de resaltar también el Año Jubilar, se han ido a Carrión de los Condes (Palencia) y Sahagún (León). Precisamente el alcalde de Carrión de los Condes no asistió a la inauguración de la muestra en Burgos al considerar como un «agravio a la España vaciada» que Su Majestad no acudiera también a esta localidad palentina. 

Las exposiciones de Las Edades del Hombre en pequeñas localidades ayudan y ponen en valor eso que se ha dado en llamar la España vaciada, que no es otra cosa que el mundo rural. En lo que a Burgos se refiere desde 1990, cuando se inició esta actividad con el inolvidable José Velicia a la cabeza, se han organizado cinco, de ellas dos (Lerma y Oña) en localidades de menos de 20.000 habitantes. En esta ocasión la Diputación burgalesa, a cambio de su aportación, no ha conseguido subsedes, pero será generosamente recompensada con unos folletos, carteles y señalética para algunas localidades de la provincia.

Resulta indiscutible que la Catedral, con motivo de su VIII centenario, albergue ‘LUX’. Otra cuestión es el debate sobre el papel de la Diputación, que, entre unas cosas y otras, no da con la tecla para resolver los problemas y carencias del Burgos rural.