Hay cosas que son tan de sentido común que parecería que tienen que ser de una determinada manera. Es más, si alguien nos pregunta por ellas, daremos por hecho que son como pensamos que tienen que ser, porque lo contrario no tiene sentido. Sin embargo, la realidad demasiadas veces no lo tiene.
El caso que voy a relatar y que sucedió la semana pasada no es un suceso raro, sino el día a día de nuestro sistema sanitario. Pongámonos en situación. Una persona que vive en Miranda de Ebro sufre un problema grave de salud, por lo que la ambulancia que le viene a recoger le lleva al hospital más cercano en el que tratar su dolencia con garantías: en este caso, el de Vitoria. Lo lógico sería que, una vez allí, o incluso ya de camino, los médicos pudieran acceder rápidamente a su historial para no demorar su tratamiento o consultar sus alergias, por ejemplo. Pues no. Ni rápida, ni lentamente. No pueden acceder a su historial. Parece increíble, pero es así.
Afortunadamente en esta ocasión esta falta de información no ha resultado decisiva, pero cuántas veces sí lo habrá sido y lo seguirá siendo, cuando alguien esté de vacaciones en la playa, o trabajando en otra ciudad, o simplemente de viaje fuera del radar de su hospital de referencia… Y ojo, porque esto no solo pasa con diferentes Comunidades Autónomas, sino que sin salir de Castilla y León tenemos una situación similar entre algunos hospitales como los de Burgos y Soria, por ejemplo.
No podemos dejar que esto siga sucediendo. En plena era de la inteligencia artificial, de la adicción a la tecnología y de las redes sociales, y cuando con un solo clic podemos acceder a los datos que las administraciones tienen de nosotros a través de la Carpeta Ciudadana, es incomprensible que ellas, las administraciones, no puedan hacer lo mismo cuando así se requiera.
Por cierto, que esta realidad es análoga a la de otros servicios como la justicia y la educación, por lo que aquí también el avance en la digitalización de los servicios y en su accesibilidad es clave para que el servicio que se presta al ciudadano sea de calidad. No hay excusas para no hacerlo ya.