Es abril y es Burgos. El domingo se celebra el Día del Libro y el tiempo puede salir por peteneras, digan lo que digan los meteorólogos. Pero es su día y los libreros volverán a sacar los ejemplares a la calle porque incluso con lluvia, como ocurrió el año pasado, están «satisfechos» con los resultados obtenidos en las anteriores convocatorias del 23 de abril. «Aunque tuvimos que abandonar la Plaza Mayor y seguir vendiendo en las librerías, hubo mucho movimiento. En Burgos el Día del Libro es un evento consolidado que está en crecimiento constante», sostiene Álvaro Manso, presidente de la Federación Provincial de Librerías. «Para nosotros es una fiesta de verdad porque hay un trajín muy grande concentrado en un solo día», añade sin llegar a concretar números.

En 2023 el sector ha seguido creciendo como en los últimos ejercicios, aunque «el incremento del primer trimestre está siendo más comedido», confirma Manso, quien ha visto cómo se incorporan a la federación nuevas librerías: Carlibur, en la avenida del Cid, y Control-C, en San Pedro y San Felices. «Pero pase lo que pase en las librerías, que son las que aumentan, la respuesta del Día del Libro siempre es buena», insiste.

Este año saldrán a la Plaza Mayor una docena de establecimientos: Espolón, Lyda, La Llave, Luz y Vida, Bosque de Letras, Carlibur, Dina 4, Hijos de Santiago Rodríguez, La Silla Mágica, Margof, Mar de Hojas y Música y Deportes. El descuento del 10% en las compras movilizará a los ciudadanos, que no solo hojearán entre ejemplares, sino esperan al domingo para adquirir las últimas novedades, las presentaciones de la semana en la ciudad (que son varias) o los títulos que nunca fallan, tanto para el público infantil como el de más edad.

Entre los libros más solicitados estarán, seguramente, los que acaban de publicar Eva García Sáenz de Urturi (El ángel de la ciudad), Juan José Millás (Solo humo), Elísabet Benavent (Cómo (no) escribí nuestra historia), Raquel Martos (Los sabores perdidos), Luis Zueco (El tablero de la reina) o Manuel Vilas (Nosotros), según las quinielas de la propia federación. No faltarán tampoco libros de autores locales, como el que acaba de presentar Juan Carlos Martínez Barrio (El puente de la lluvia), Burgos, Historia(s) de la radio o el del joven Javier Cobo (Haereditatem).

Precisamente la presencia de autores burgaleses firmando libros un día como el 23 de abril es algo en lo que trabajan los libreros de cara al año que viene. Junto a las casetas habituales, con cuatro mesas por librería, quieren colocar otro expositor que sirva para que los escritores burgaleses mantengan un encuentro con sus lectores, como ya se hace durante la Feria del Libro que se celebra en mayo.

En cuanto a la ausencia este año de puente, al no trasladarse el festivo al lunes, desde la Federación Provincial de Libreros no esperan una mayor afluencia o como mucho estará compensada: «Que no haya puente puede suponer que se paseen más burgaleses, pero cuando lo ha habido también han venido y comprado turistas que están de paso por la ciudad, así que lo uno por lo otro, no creo que condicione mucho. Otra cosa es el tiempo, pero viendo que el año pasado tampoco fue mal, que sea lo que tenga que ser», resume.

Como en los últimos años, además de los libreros en la Plaza Mayor estará la asociación de floristas (Flojabur) con la venta de rosas.

En detalle...

Las librerías: Participan Espolón, Lyda, La Llave, Luz y Vida, Bosque de Letras, Carlibur, Dina 4, Hijos de Santiago Rodríguez, La Silla Mágica, Margof, Mar de Hojas y Música y Deporte. 
Descuentos: Los libreros estarán en la Plaza Mayor el domingo, en horario continuado, de 11:30 a 20 horas. Los libros adquiridos tendrán un descuento del 10%.
Rosas. Colabora la asociación de floristas Flojabur con la venta de estas flores.