El Burgos se queda sin gol

Juan Carlos Moreno / Burgos
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Equilibrio y muy poco fútbol. La primera parte estuvo muy igualada, con pocas ocasiones, un juego muy pobre y un posible penalti por mano de Bardal

Carralero estuvo muy vigilado durante todo el partido. - Foto: Jesús J. Matías

Burgos C.F.: 0  Cultural: 0

Burgos C.F.: Rodri, Andrés, Maureta, Gallardo, Dani Guillén, Moke (Pacheta, M-82), Cerrajería, Joaqui (Arkaitz, M-56), Gabri (Gerica, M-61), Carralero, Prats, Moke.

Cultural: Toño, José Antonio, Gonzalo, Negral (Valdés, M-85), Santi Santos, Hedrera, Adán, Barda,l Diego Torres (Raúl Torres, M-73), Ortiz, Víctor (Mario Villar, M-77).

Incidencias:

Árbitro: Leo Ollo, de Navarra, asistido por Zalba Troyas y Murillo Soroa. Mostró tarjeta amarilla a Andrés, Maureta, Cerrajería y Pacheta, del Burgos; y a Gonzalo, Adán, Bardal y Diego Torres, de la Cultural.

Público: Unas 3.000 personas en El Plantío. Antes de iniciarse el choque se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento del expresidente de Gobierno Adolfo Suárez.

Lo mejor: La solidez defensiva del equipo de Calderé, que no pasó demasiados apuros, y el ambiente que montaron varias peñas en el Fondo Sur, animando continuamente a su equipo.

Lo peor: El Burgos tiene problemas con el gol. Le cuesta crear ocasiones y mucho más materializarlas.

El Burgos tiene un problema con el gol. La estadística es reveladora. El conjunto de Calderé ha marcado un tanto en cinco partidos, una cifra raquítica para un equipo que  quiere aspirar a luchar por la cuarta plaza de la clasificación. Ayer fue una nueva demostración de esta carencia. No es que el portero de la Cultural salvase a su equipo. Simplemente es que apenas tuvo que intervenir en tres ocasiones, a los disparos de Cerrajería en la primera parte y Arkaitz y Gallardo en la segunda. Si al poco caudal ofensivo que actualmente presenta el Burgos se le une la fortaleza defensiva y experiencia de la zaga leonesa, el 0-0 final parecía un resultado cantado, sobre todo porque tampoco el conjunto leonés tuvo oportunidades para llevarse los tres puntos, salvo tres intervenciones de Rodri en los primeros 45 minutos, un chut lejano de Ortiz que se marchó rozando el larguero y otro de Torres casi al final.

Calderé sorprendió de salida dando la banda derecha a Joaqui y dejando a Arkaitz en el banquillo. Luego explicó que su objetivo era explotar las carencias de Gonzalo, improvisado lateral izquierdo de la Cultural, pero lo que quedó en evidencia fueron las propias carencias actuales de Joaqui, muy lejos de su mejor versión, aquella que mostró en su etapa en la Arandina.

El resto del once fue el esperado y tampoco sorprendió la puesta en escena de ninguno de los equipos. El Burgos salió fuerte, mentalizado, pero muy impreciso y con un rival que salió a presionar arriba y provocar el abuso del juego largo burgalés. De hecho el primer aviso serio llegó en el minuto 6, con un buen disparo de Ortiz que encontró una excelente respuesta del debutante Rodri, que tuvo que intervenir otras dos veces ante Adán.

Al Burgos le costaba horrores llegar al área leonesa. Cuando lo intentaba por la derecha, Joaqui se estrellaba contra la defensa, y por la izquierda, Carralero era sometido a una intensa vigilancia para abortar su conexión con Prats. Y precisamente de estos dos jugadores nació la acción más polémica del partido, con un centro desde la izquierda del mallorquín interceptado en el área por Bardal. Los jugadores y banquillo pidieron sin éxito penalti, pero esta acción los animó y en el tramo final de la primera mitad se acercó con más peligro con una internada pésimamente finalizada de Joaqui, un disparo de Cerrajería desviado por Toño y un centro de Prats que Joaqui no supo rematar.

Gerica y Arkaitz

Calderé no tardó mucho en cambiar el guión en la segunda mitad. Tras un susto propiciado por un disparo lejano de Ortiz, quitó a Joaqui y sacó a Arkaitz, un futbolista mucho más intenso. Poco después sacó a Gerica por un agotado Gabri y el Burgos cambió su estilo y buscó jugar por abajo, con la colaboración de Carralero, que abandonó su banda y centró mucho más su juego. De las acciones combinativas de estos jugadores llegaron las mejores aproximaciones, aunque sin acierto en los últimos metros.

La Cultural fió toda su suerte a buscar alguna contra y el Burgos apretó más, aunque sin éxito y solo una buena oportunidad de Gallardo pudo romper un partido que parecía destinado desde el inicio a acabar sin goles.