En 2018 comenzaron las obras de las piscinas de Santo Domingo de Silos y todavía no se han inaugurado, lo que ha generado que su deterioro haya empezado y que a los vecinos les genere cierto nerviosismo. Se trata de un ambicioso proyecto para un municipio con 264 censados, pero el problema está en que una vez que se realizaron los vasos de la instalación se paralizaron los trabajos para centrarse en la pista polideportiva ubicada también en este nuevo complejo. «Están deterioradas porque es un proyecto que va para cinco años, tienen agua retenida, pero solo hace falta cambiarla, limpiar las paredes y arreglar alguna baldosa», defiende el alcalde, Emeterio Martín.
Desde el Ayuntamiento buscan completar lo antes posible la pista polideportiva y por ello se ha sacado a licitación su cubierta por 300.000 euros, después de que la primera vez que se intentó -en julio- ninguna empresa mostrase interés en su ejecución. Una vez que se complete esa parte ya se podrán realizar los vestuarios, los baños, las duchas, la taquilla, la sala de curas y del socorrista. Se utilizarán por los usuario de ambas instalaciones.
«Es una obra grande para un pueblo pequeño, entonces lleva su tiempo», asegura el alcalde, que argumenta que la pandemia les retrasó los plazos y que a eso se suma que han estado sin administrativos durante meses.
Las obras en las piscinas se tuvieron que paralizar en diversas ocasiones debido a las limitaciones económicas para un proyecto de esta dimensión. Se enmarcan en un espacio de 5.000 metros cuadrados, denominado como el paraje de La Calderera, y se han llevado a cabo en diversas fases, puesto que el Ayuntamiento no quería endeudarse. En 2020 se pretendía estrenar la instalación, pero todo se retrasó al realizar de manera simultánea la gran pista deportiva que se ubicará justo al lado y a eso se sumaron luego «los dos años de pandemia». Además de arreglar todas aquellas deficiencias que hayan surgido durante este tiempo, quedará adecentar todo el entorno y poner el césped para que se puedan comenzar a utilizar.
En este momento el alcalde no se aventura a dar una fecha exacta de cuándo se abrirán al público. «Dependerá mucho de los secretarios, de cuándo lo saquen a licitación, si no nos piden a la vez todos los papeles, si se marchan sin avisar y nos quedamos sin nadie aquí... no es cuestión del alcalde o los concejales», dice Martín, que lamenta que han pasado muchos meses sin nadie que se encargase de las cuestiones de la administración en la localidad.
Lo más inminente en la actualidad pasa por completar la cubierta de la pista polideportiva para seguir avanzando con la zona de vestuarios y así estrenar cuanto antes este gran complejo de ocio que supondrá un verdadero revulsivo para la actividad del pueblo. Martín considera que la gente tampoco lo puede criticar y que, aunque los plazos se han retrasado más de previsto en un principio, se contará con una instalación de futuro.