El inicio del curso político, punto de partida del Gobierno de coalición del PP y Vox para comenzar a profundizar en la elaboración del Presupuesto de 2024, dará ya las primeras pistas sobre la hoja de ruta que se marcará el nuevo Ejecutivo y en el que necesariamente tendrá que establecer sus prioridades. Porque ya no es que los recursos sean limitados, es que en el próximo ejercicio las cuentas municipales vendrán marcadas por un gasto corriente que se anticipa ya que se va a disparar. Prueba de ello es el encarecimiento de cinco de los grandes contratos municipales, cuya previsión es que se incremente su gasto, entre todos ellos, en alrededor de 9 millones de euros.
Todo ello, sin contar otros contratos de menor cuantía que también se van a tener que renovar al alza y que van a provocar que el gasto corriente, si se cumplen las previsiones, se vaya a incrementar en más de 40 millones este mandato. Cuestión aparte, además, será la evolución del gasto de personal.

De todas las facturas que se le va incrementar al Ayuntamiento, la que más se va a encarecer es la relativa a la gestión del Centro de Tratamiento de Residuos del Ecoparque de Cortes. Las cifras que manejan en la Concejalía de Hacienda hablan de que se pasará de pagar 470.000 euros al año a realizar un desembolso de 3,7 millones. En este caso, eso sí, el gasto se desboca debido a que el equipo de Gobierno trabaja en una encomienda de gestión a Somacyl para que renueve unas instalaciones obsoletas que precisan de una inversión de 25 millones de euros. Una cantidad, esta última, que anticipará la sociedad controlada por la Junta pero que el Ayuntamiento deberá devolver a lo largo de los próximos quince años (junto con los gastos de gestión, financiación...).

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