"Nos tenemos que ir en las mejores condiciones"

ANGÉLICA GONZÁLEZ
-

Maite Martínez, auxiliar de Enfermería, es una de las 90 trabajadoras de San Juan de Dios que, con toda probabilidad, se irán a la calle el 31 de diciembre. En nombre de sus compañeras reflexiona sobre los últimos convulsos años de este hospital

"Nos tenemos que ir en las mejores condiciones" - Foto: LUIS LÓPEZ ARAICO

Maite Martínez Armiño lleva 32 años trabajando como técnica de cuidados auxiliares de Enfermería en el Hospital San Juan de Dios, lo que quiere decir que cuando comenzó su labor aún ni existía Sacyl. Las competencias en materia de Sanidad, por entonces, no habían sido aún transferidas a esta comunidad autónoma y se regían por el Insalud, instituto con el que el centro firmó el primer convenio de colaboración con el sistema público. Desde entonces han sido muchas las vicisitudes que han vivido las instalaciones del Paseo de la Isla pero el hilo conductor de toda esta historia ha sido la dependencia permanente de la sanidad pública, algo que llega a su fin en apenas unos días. La semana pasada la dirección del centro informó a las trabajadoras de su intención de iniciar un expediente para extinguir todos los empleos y proceder al cierre del hospital. 
«Esta vez parece que es la definitiva aunque llevamos ya muchos años, casi una década, en una permanente situación de incertidumbre porque al llegar diciembre siempre nos decían que no sabían si  nuestro trabajo iba a continuar. ¿Alguien se cree que se puede vivir así?», se pregunta Maite, cuyo sentir es igual al del resto de la plantilla, 90 personas -la mayoría mujeres- de una media de edad de entre 45 y 50 años que se van a la calle y van a tener muy complicado volver al mercado laboral. En  San Juan de Dios hay  auxiliares, enfermeras, médicas, trabajadoras sociales, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, psicólogas, limpiadoras, personal de mantenimiento, administrativas...

(Más información en la edición en papel de hoy de Diario de Burgos)