Calero resucita al Cartagena

J.C.M. / Burgos
-

El extécnico del Burgos CF llegó a Cartagonova tras la jornada siete. El equipo era último, con tres de 21 puntos, y ahora suma 31, fuera de los puestos de descenso, con cinco victorias, un empate y una derrota en esta segunda vuelta

Álex Bermejo intenta controlar el balón ante Alcalá, central del Cartagena. El futbolista del Burgos anotó dos de los tres goles en el Cartagonova. - Foto: Agencia LOF

El FC Cartagena que visita esta noche El Plantío tiene un nombre propio, Julián Calero. El extécnico del Burgos CF ha resucitado a un equipo que estaba prácticamente desahuciado. Él, con su forma de expresarse habitual, lo situó en la UVI y ahora ya está fuera de los puestos de descenso. Su trabajo está resultando espectacular y las cifras así lo demuestran. Pero aún le resta un largo recorrido para consumar el milagro de la salvación. 

Julián Calero llegó a Cartagena a finales de septiembre. Para muchos fue una auténtica sorpresa. Tras triunfar en el Burgos apuntaba a un proyecto más ambicioso, incluso se habló de entrenar en el extranjero, pero la realidad es que se quedó sin un banquillo a la espera de alguna llamada. Y ésta llegó desde Cartagena, donde la marcha de Luis Carrión a Oviedo provocó una auténtica revolución. Llegó Víctor Sánchez al banquillo, pero sus inicios de Liga fueron penosos y llegó el inevitable cambio en el banquillo. Julián Calero aceptó el reto y recogió a una plantilla hundida. En las primeras siete jornadas solo había sumado tres puntos. La mejoría, sin embargo, no fue inmediata. Sufrió y mucho. Con jugadores desmotivados, otros fuera de forma y otros descontentos era muy difícil la reacción. Sin embargo, el técnico madrileño comenzó a utilizar una de sus mejores armas, la seducción, la mentalización de sus jugadores, con mensajes muy claros como los que ya utilizaba en sus tres años en Burgos.

Su objetivo era mejorar y mantener vivo al equipo hasta el mercado de invierno, en el que buscaría soluciones a sus problemas. No era una tarea fácil. En las jornadas 15 y 16 la salvación estaba a nueve puntos, reaccionó con tres empates y dos victorias, pero antes de Navidad llegaron las derrotas ante el Burgos y el Huesca y el Cartagena se marchó de vacaciones a ocho puntos de los puestos de salvación. 

La situación tenía muy mala pinta y llegó la transformación en ese periodo vacaciones. Lo primero, en la plantilla, llegaron cinco futbolistas importantes, sobre todo cuatro de ellos, con Andy Rodríguez a la cabeza. El ex del Burgos, recién salido de una grave lesión, siempre fue importante para Calero, que le dio el mando del centro del campo, además de aportar su extraordinaria técnica en las acciones a balón parado. También llegaron Darío Poveda, cedido por el Getafe, que ya lleva dos goles; Arnau Ortiz, Diego Moreno y Mejías. Junto a ellos siguen siendo importantes futbolistas como Ortuño (máximo goleador con siete tantos) e Iván Calero, hijo del entrenador.

Regresó la competición en enero y comenzó el subidón del Cartagena. Ganó en Santander (0-2), al Amorebieta (1-0), al Mirandés (1-0) en el Cartagonova, al Zaragoza en La Romareda (1-2) y empató en Albacete. En total, cinco victorias y un empate, siendo el mejor equipo hasta la pasada jornada de esta segunda vuelta, racha que se quebró el pasado fin de semana contra el Elche.

Ahora el Cartagena ya tiene a cuatro equipos por debajo en la clasificación, que es el objetivo final que tiene Julián Calero al frente del Cartagena. Y en Burgos intentará romper la racha del equipo de Jon Pérez Bolo en El Plantío.