El triunfo de la miel de la Demanda

B.A.
-

Abel García, apicultor de Monasterio de la Sierra, logra la medalla de oro en brezo en los París Honey. «De los 4 españoles premiados, 2 somos de la comarca»

Abel muestra el certificado del premio para su miel El Castillejo. - Foto: f2estudio

La miel que se produce en la Sierra de la Demanda conquista los paladares más allá de nuestra frontera y obtiene reconocimientos internacionales. El último, el recibido por Abel García, de Monasterio de la Sierra, que se alzó con la medalla de oro en la modalidad de brezo con su miel El Castillejo en la última edición de los París Honey Awards. «Dos de los cuatro premiados elaboramos en la misma comarca, así que eso le da más fuerza y valor al premio, es señal de que en la zona se está trabajando bien», comenta el productor recordando también el buen hacer de su colega en Silos, José Luis Martín, que obtuvo medalla de oro y de platino en el mismo certamen. Los otros galardonados son de Ibiza y de una comarca entre León y Asturias. 

La miel con la que Abel sedujo al jurado en París «es bastante fuerte y con toques amargos» y su autor quiso probar suerte en el concurso con ella dada su peculiaridad. «Está elaborada en los colmenares más altos que tengo. Este año no ha sido bueno, ni para la producción ni para las abejas, y me presenté al certamen buscando un aliciente para mi ante una pasada campaña complicada, para intentar subirme la moral», relata Abel, que otorga el mérito del premio y el sabor rico de la miel al trabajo que hacen sus obreras. «Me dan la enhorabuena a mí, pero la receta es de las abejas, que la hacen diferente cada año en función de la floración». 

El secreto del sabor de El Castillejo es la variedad de brezo que hay en Monasterio de la Sierra, donde tiene sus colmenas y procesa la miel. «Hay cuatro tipos diferentes, que florecen desde finales de abril hasta septiembre, y hay que añadir un quinto, que se llama biércol. Esta diversidad no se da en todos los sitios, y depende de cuál de ellos florezca más o antes se obtienen esos toques salados o amargos que contrastan con el dulce», afirma el apicultor, que asegura que de esta forma se obtiene un producto «con muchos matices». 

Este premio le sirve a Abel para afianzar más su postura como defensor de la miel de calidad que se viene elaborando en la Sierra de la Demanda. «La miel de brezo que más se comercializa es la de la cordillera cantábrica. Siempre me ha parecido que aquí, y en general en el sistema ibérico, hay más diversidad de plantas y que el producto es más especial», justifica el apicultor, que comercializa la miel premiada, de la cosecha del 2022, en su casa de Monasterio, en la cantina El Soto de la localidad, y en tiendas de Salas de los Infantes y de otras poblaciones de comunidades como País Vasco o Navarra. 

Otros premios. Esta es la segunda vez que Abel García se presenta a una competición para poner a prueba su miel con las de otros elaboradores, y lo cierto es que en las dos ocasiones ha salido reforzado. Antes de este concurso internacional anual, este año en París, pero el pasado en Londres, concurrió en el 2020 al Certamen Hispano Luso de Mieles Ecológicas, donde El Castillejo obtuvo el panal de plata. «Ese año no hubo panal de oro, y mi miel de brezo fue la más votada de todas las que se presentaron, que eran de España y Portugal», detalla el apicultor.