Santa María de Garoña puso en marcha en 1992 un Centro de Información con el que poder mostrar a sus visitantes, una media de 15.000 año, cómo funcionaba la central nuclear. Ante la imposibilidad de ver en directo las entrañas de la planta, las maquetas y paneles del Centro de Información ayudaban a visualizar sus tripas. La parada del reactor en 2012 detuvo toda la actividad de este espacio expositivo, pero la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos, Enresa, lo reabrirá, una vez renueve al completo su contenido expositivo.

La empresa pública acaba de licitar por 172.800 euros la tarea de equipar y adecuar el centro sobre la base del proyecto museográfico ideado por la empresa Intervento, con sede en Madrid. La firma que se adjudique el contrato tendrá diez meses para ejecutar los trabajos. Enresa quiere reabrir Garoña a los visitantes, pero esta vez, para que descubran los pasos del desmantelamiento de la planta nuclear, iniciado formalmente el pasado 19 de julio. Antes, Nuclenor con el aval de Enresa ya había realizado tareas preliminares al desmantelamiento.

El público objetivo al que se dirigirá Enresa con su centro de información es el de las «visitas técnicas, institucionales, asociaciones del entorno de la central y otros interesados», como explican desde la firma pública. Aplicará en Garoña la experiencia adquirida durante el desmantelamiento de José Cabrera en Zorita y en el que más de 6.000 personas de diferentes países han visitado el Centro de Información de la planta nuclear alcarreña. En ella, la mayoría de las visitas han sido de técnicos expertos del sector y estudiantes de ingeniería.

Para Enresa, «es importante que la población sea partícipe de las soluciones técnicas que adopte» en el desmantelamiento de Garoña, donde se va a intentar generar la menor cantidad posible de residuos radiactivos para lo que experimentará en busca de la completa descontaminación de residuos de muy baja actividad. La directora del proyecto de desmantelamiento de Garoña, Esther García Tapias, avanzó en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo este verano que en Garoña se aplicarán por primera vez en España procesos de descontaminación química y mecánica mediante granallado -propulsión de un material a alta velocidad contra una superficie- para «intentar» que grandes piezas metálicas del edificio de turbinas con muy baja actividad radiactiva próxima al límite inferior se desprendan por completo de esa contaminación radiológica y pasen a convertirse en un material convencional que pueda acabar en un vertedero o un centro de reciclado.

Esa y otras cuestiones serán las que se den a conocer en el centro de información, cuyo fundamento es la «política de transparencia y de puertas abiertas fundamental para Enresa», como explican desde la firma pública. El antiguo centro de información de Garoña cuenta con casi 500 metros cuadrados de exposición, que ahora se adecuarán para mostrar varios apartados.

Seis ejes temáticos. Uno se centrará en explicar qué es Enresa y sus hitos más relevantes. Otro en el funcionamiento de la central nuclear de Garoña. El tercer ámbito de la exposición servirá para explicar el almacenamiento de combustible gastado en los contenedores que se depositarán al aire libre sobre las losas sísmicas ya construidas; la adaptación del edificio de turbinas como centro logístico del proceso de desmantelamiento, así como el desmantelamiento del reactor y las demoliciones de sus edificios. Otro apartado se centrará en los tipos de residuos y su almacenamiento y los dos últimos en los valores de Enresa y su experiencia en desmantelar nucleares.