Uno de los aspectos que debe reforzar cualquier ciudad que aspire a ser Capital Europea de la Cultura es fortalecer los lazos con el viejo continente. Así se lo apuntaron esta semana a la delegación burgalesa que presentó la candidatura a los organismos europeos, si bien todavía el Ministerio de Cultura no ha elegido qué ciudades españolas podrán aspirar al título en 2031. 

Aun así, la candidatura burgalesa camina ya en esa dirección buscando proyectos que puedan permitir la colaboración entre artistas locales y europeos. Para ello prepara un concurso de ideas (el viernes Promueve no pudo aprobarlo por una cuestión técnica) con la intención de financiar diez propuestas culturales que tengan esa dimensión. También deberán reflexionar sobre las líneas argumentales de la candidatura, los valores europeos comunes y generar la participación de la ciudadanía burgalesa.

Dotadas con 14.500 euros cada una (IVA no incluido), las propuestas se podrán realizar desde disciplinas como artes visuales y plásticas; cine y audiovisual; artes escénicas y música; arte digital, y una hibridación entre el sector artístico y la economía creativa.

Los criterios de selección valorarán la colaboración entre colectivos; la reinterpretación de los espacios públicos; la reflexión artística sobre el futuro de las ciudades medias y cómo afrontar retos como la despoblación, la fuga de talento y el envejecimiento;la vinculación con el patrimonio cultural y/o humano de la ciudad, y la participación de actores culturales europeos.

Los proyectos que se presenten para optar a la subvención deben hablar de las siguientes temáticas: Burgos Artefacto Cultural (sobre los espacios públicos y su sostenibilidad, resiliencia e inclusión), Burgos Verde (el cambio climático y el desarrollo sostenible), Burgos en Clave de Mujer, Burgos Híbrido (que vinculen lo artístico con lo industrial, comercial y hostelero) y Burgos Integrador (el sector cultural y los cuidados, el envejecimiento activo, la inclusión social, infancia, salud, etc.).