El duodécimo congreso de CCOO en Burgos no deparó sorpresa alguna. El único candidato a dirigir los destinos del sindicato durante los próximos cuatro años, Juan Núñez, salió elegido nuevo secretario regional con el voto de 62 delegados y la abstención de 31. Con un lenguaje directo y cercano hizo un llamamiento a sus compañeros para que no se dejen vencer por el «miedo» que se ha instalado en la sociedad «con la pandemia» y les emplazó a «reaccionar» como el mejor antídoto contra la «parálisis» que atenaza a parte de la ciudadanía. «Es lo que los trabajadores esperan de nosotros, que hagamos uso de nuestra fuerza para cambiar las cosas», subrayó.  

La pandemia y sus efectos económicos y sociales traerán consigo «nuevos conflictos» que se unirán a los «viejos» y exigirán «la unión y la movilización» de todos los integrantes de CCOO. Vaticinó cuatro años, hasta 2025, «de picar mucha piedra» en la lucha «por la recuperación de derechos», momento en el que resaltó la importancia de «derogar la reforma laboral» y de proponer «una nueva fiscalidad que redistribuya de forma más justa la riqueza».

La crisis del coronavirus, a su juicio, ha puesto de manifiesto «el adelgazamiento de los servicios que presta la Administración pública, que se deja ver en los sectores de la sanidad, de la educación e incluso de la Justicia». En este contexto destacó «el colapso» de los juzgados sociales de Burgos, «con centenares de demandas paradas de trabajadores que reclaman salarios, el dinero de los ERTEs y otros derechos».

En relación al contexto político actual, apeló a recuperar los viejos valores, «los de la educación y el respeto a las ideas del contrario sin caer en las actitudes propias del fascismo, en la exclusión y la mala leche». 

Núñez asumió el compromiso de velar por un sindicato centrado en toda la provincia, alejado de cualquier localismo, pues «solo desde la unión CCOO podrá crecer en Burgos y también en Castilla y León». Su ejecutiva estará formada por Fidel Velasco, Manuel Capilla, María Henar Paredes, Ana María Gómez y Julia Quirce (...).

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