Radiografía de un verano de mucha lectura

R.E.C. / Burgos
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El periodo estival se ha convertido en una de las mejores épocas del año para dedicar a la literatura. Así lo constatan bibliotecas y librerías que estos días aumentan la demanda de usuarios y clientes

Julio y Catalina, abuelo y nieta, acuden con mucha frecuencia a la Biblioteca Pública gracias a la pasión de ambos por la lectura. - Foto: Iván López

España es un país de lectores. Eso al menos dicen los bibliotecarios y libreros, secundados por las cifras que llevan años contradiciendo al tópico habitual que machaconamente se ha repetido una y otra vez. El porcentaje de lectores, que experimentó un incremento en 2020 y se consolidó en 2021, siguió creciendo en 2022, más significativamente entre los jóvenes -echando por tierra otro manido mito-, según el barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España en 2022 del Ministerio de Cultura y Deporte.

Casi el 65% de los españoles leen algún libro en su tiempo libre, un porcentaje que se incrementa un punto si se incorpora a los lectores exclusivos de cómics, un género en auge. El verano se ha convertido ya en el periodo ideal para aprovechar estas semanas de ocio y esparcimiento para dejarse cautivar por una buena lectura. Por las bibliotecas y librerías de la ciudad transitan estos días numerosos usuarios en busca de la última novedad que consiga alejarles del mundanal ruido, al menos, mientras dure la lectura.

Las novelas negras e históricas, junto a las románticas, siguen siendo los libros más reclamados, hasta el punto que las bibliotecas acumulan un largo listado de reservas con las últimas novedades editoriales, como El viento conoce mi nombre, de Isabel Allende; La rebelión de los buenos, de Roberto Santiago; El nido del cuco, de Camila Läckberg o La taberna de Silos, de Lorenzo García Acebedo, entre otros títulos.

Las novelas negras e históricas, junto a las románticas, siguen siendo los libros más demandados por los lectores. Las novelas negras e históricas, junto a las románticas, siguen siendo los libros más demandados por los lectores. - Foto: Iván López

Los más pequeños van perfilando también sus gustos literarios, animados por el tiempo libre que da las vacaciones, y acuden en masa en busca de lo último de Joana Marcus o Ariana Godoy, sin olvidar otros formatos como el manga o los cómics. «Mortadelo y Filemón están viviendo una segunda juventud», confirman desde la biblioteca María Teresa León, especializada en literatura juvenil. 

Otras instalaciones, como la Biblioteca Pública recibe gracias a su ubicación, pero también a su gran catálogo, a usuarios como Julio y Catalina. Abuelo y nieta acuden con frecuencia a leer o a intercambiar libros por su amor a la literatura. Un hábito que le ha sabido transmitir y que ahora ella refleja en los libros Anna Kadabra, Geronimo Stilton o Isadora Moon

Igualmente, el Bono Cultural Joven ha desterrado el tópico de quienes creían que una gran parte de los jóvenes que llegarían a la mayoría de edad este año malgastaría el dinero del Ministerio de Cultura y Deporte. No está siendo así, ya que quienes han cumplido los 18 años están demostrando tener bastantes más inquietudes culturales de lo que muchos creían.

Lo saben bien en Música y Deporte, en pleno paseo del Espolón, con un repunte significativo en novela juvenil, gracias sobre todo a las editoriales adolescente de Crossbooks o Hidra, pero también al calor de las series Heartstopper o Culpa Mía, de Mercedes Ron. «Al final, todo lo que aparece en Netflix experimenta un boom y rompe en ventas. La gente consume el producto audiovisual y les interesa ampliar ese mundo y es una cosa curiosa porque antes era al revés».

Desde que comenzara el periodo estival, las librerías de la ciudad están viviendo un periodo dulce en cuanto a ventas se refiere, equiparándose incluso a fechas señaladas como la Navidad o el Día Internacional del Libro. «Pensaba que agosto iba a ser un mes flojo y para nada, todo lo contrario. En comparación, ha sido mucho peor marzo y abril, incluyendo la Feria del Libro, que agosto que ha tenido muy buenas ventas», admite Lucía Alonso, dueña de la librería Santiago Rodríguez. Un hecho que asocia principalmente al turismo nacional pero también al extranjero que se anima con el español.

Bibliotecas, algo más que libros. El futuro de las bibliotecas va asociado en gran parte con la evolución social y cultural de la sociedad. Por ello, al préstamo y consulta de libros, unido al de películas y revistas y los diversos programas de dinamización lectora, se les incorpora también otros servicios relacionados con los videojuegos y juegos de mesa que completa la oferta de estas instalaciones.

«Los juegos de mesa están siendo un boom, es increíble. Está teniendo una gran aceptación tanto para pequeños como para adultos, por ello, es una colección que estamos ampliando desde que empezamos a comprar el año pasado y están saliendo muchísimo. También en videojuegos y películas, que sorprendentemente todavía tienen vida», afirma María José Rojo, responsable de la Biblioteca Pública, al mismo tiempo que confirma la inversión en la renovación de guías de viajes, «la gente vuelve a salir y se nota la demanda y el interés por ellas».

Los más leídos.

El viento conoce mi nombre: Una historia de violencia y amor en la Viena de 1938 donde Allende narra los sacrificios que los padres hacen por sus hijos.

La taberna de Silos: Lorenzo G. Acebedo ha escrito uno de los libros del año. Un thriller que narra con humor un asesinato en el monasterio de Silos.

Prometeo americano: La biografía de Oppenheimer, padre de la bomba atómica y protagonista de la nueva película de Christopher Nolan.

El peso de la perfección: El burgalés Manuel Baruque recoge algunos de los episodios más duros en su lucha contra la anorexia.

Nuestro cuerpo: Juan Luis Arsuaga aúna ciencia y arte para abordar las maravillas que componen el cuerpo humano y su evolución a lo largo de los siglos.